El Canal 13 y el sitio de noticias Ynet citaron a funcionarios israelíes que dijeron que Jerusalén identificó una oportunidad para seguir adelante con un acuerdo debido a la crisis de COVID-19 en la Franja de Gaza, gobernada por Hamás, recogió The Times of Israel.

Gaza ha experimentado en los últimos días un aumento en los casos de coronavirus y muertes por la enfermedad.

Transmitida por intermediarios egipcios, la propuesta de Israel sería que estaría listo para ayudar en la crisis de salud de Gaza y liberar a prisioneros palestinos, a cambio de la liberación de dos civiles israelíes, Avera Avraham Mengistu e Hisham al-Sayed, y los restos de los soldados israelíes Oron Shaul y Hadar Goldin, muertos durante la guerra de Gaza de 2014.

No obstante, Israel habría condicionado la liberación de los prisioneros que propone: no dejaría en libertad a ningún reo palestino que estuviera tras las rejas por el delito de homicidio, algo que Hamás potencialmente se negaría a aceptar.

Israel, según los reportes, estaría considerando seriamente este plan y estaría dispuesto a seguir adelante rápidamente para llegar a un acuerdo.

En abril surgieron informes similares sobre una ventana de oportunidad para garantizar la libertad de los cautivos y los restos de los soldados, pero no se desarrolló nada, en gran parte porque cada parte ha diferido en sus pretensiones.

Hamás ha exigido dos rondas de liberación de prisioneros: la primera a cambio de información sobre los cautivos, la segunda a cambio de la entrega real a Israel de los cautivos y los cadáveres. Israel se ha negado, insistiendo en que cualquier acuerdo debe realizarse en un solo intercambio.

En los últimos años, las conversaciones se han estancado por las demandas de Hamás de que Israel libere a cientos de prisioneros encarcelados, incluidos los responsables de los ataques terroristas.

Gaza, gobernada por el grupo terrorista islamista Hamás desde 2007, se encuentra bajo un estricto bloqueo impuesto por Israel, un factor que ha llevado a una débil infraestructura de salud en el enclave palestino.

Hamás actuó rápidamente en marzo para prevenir la propagación del coronavirus, permitiendo solo la entrada a un número limitado de personas, que luego debieron aislarse durante tres semanas en centros de cuarentena.

A mediados de agosto, Gaza había registrado solo alrededor de 100 casos de COVID-19, pero las últimas dos semanas han visto un rápido deterioro en la contención.

El lunes, Hamás dijo que había recibido 20,000 kits de pruebas de detección de coronavirus de la Organización Mundial de la Salud, después de advertir que ya no podía realizar pruebas debido a la escasez.

Enfrentando un aumento en los casos, Hamás también anunció un cierre los fines de semana que duran desde el 11 de diciembre hasta el final del mes. También cerró escuelas, universidades, jardines de infancia y mezquitas.

Gaza ha registrado casi 25,600 infecciones por coronavirus, incluidas alrededor de 150 muertes.