Recrear constantemente la salud física y mental

Estamos viviendo épocas muy complejas como humanidad y como individuos. Transitamos por situaciones muy difíciles para entender y enfrentar.

Con la intención de que pueda ayudarnos a comprender qué nos pasa, cómo cuidarnos, consultamos al licenciado Diego Núñez, psicólogo, especialista en Emergentología, a todo aquello vinculado con situaciones de estrés.

El licenciado Núñez dijo que, en principio, lo que tenemos que tener en cuenta es que, desde la salud mental, aún nos estamos enfrentando a una situación de emergencia sanitaria como consecuencia de la pandemia del coronavirus, que esto los hizo desafiar circunstancias prácticamente inéditas, y que a la vez, produjo cambios en muchísimas personas, los que todavía transitan hoy. Indicó que los profesionales de la salud se vieron sometidos a escenarios para los cuales no estaban claramente preparados.

El especialista señala que aún hay mucha gente se siente afectada, y que” resulta agotador crear nuevas estrategias para afrontar este sentimiento nuevo en la gente de sentirnos solos aislados”, y no solamente por el aislamiento impuesto en su momento, sino que al producirse un quiebre en la vida individual y en la comunidad, eso hizo a la vez que también aparecieran síntomas, como el miedo, el estrés la incertidumbre en muchas personas.

“Lo que surge a partir de esto es la carencia de recursos, recursos que poseemos pero que no conocemos, y los que nunca nos han enseñado a poder identificar, que es lo que todavía de alguna manera repercute desde la salud mental en relación con lo que es el coronavirus y a esta crisis mundial que es la pandemia”.

Acerca de estos cambios y de la dificultad que tenemos los adultos, al parecer mayor al de las generaciones jóvenes. para adaptarnos, el especialista sostiene que de hecho, para los más jóvenes, estas dificultades son un estímulo, y que, en cambio no nos han enseñado a las personas adultas más grandes, identificar los recursos.

Agregó que se trabaja desde la “salutogénesis”, que es el origen de la salud, que de acuerdo con la mirada del doctor Aarón Antonovsky, fallecido hace unos años, investigador y generador de la salutogénesis, que sostenía que la salud debe ser constantemente recreada, que es justamente lo que sucede hoy en día en cuestión de salud mental.

Recrear constantemente la salud; y esto es a raíz de que el mismo estrés forma parte de las condiciones naturales de la vida, o sea que no lo veamos como una dificultad, sino todo lo contrario, veamos esta situación  como un estímulo”, subrayó. Y añadió que necesitamos para esto, conocer y reconocer cuáles son nuestros recursos, y que, justamente ahí es donde comienza el trabajo de fondo de la salud mental,  no observar esto como una patología, como un problema, sino como un estímulo, una posibilidad de trabajar con esos recursos.

Sobre si es estrés es una nueva enfermedad mental, y si ello es así, cuáles serían las herramientas para enfrentarlo, el Psicólogo afirmó, en primer término, que el estrés no es una enfermedad, si bien, y lamentablemente hoy en día todavía se lo siga tratando como una patología. “El estrés es un proceso natural de adaptación que poseemos las personas que forma parte natural de nuestra cotidianeidad”, indicó. Y agregó que el estrés no es únicamente mental, sino que es integral, que hablamos de tres niveles de estrés: el estrés homeostático, que es el estrés interno regulador en nuestro cuerpo, el estrés alostático el de adaptación y el estrés pantostático, el del medio que nos rodea, que nos pone en riesgo la vida en lo personal en lo comunitario, y que es lo que ha generado la pandemia. Remarcó que la pandemia no es la que nos genera estrés,  sino que es el modo en que vamos a utilizar nuestros recursos frente a la pandemia, y que por eso, es importante conocer y reconocerlos para no elevar esos niveles de estrés.

Citó nuevamente a Aarón Antonofsky,”lo máximo a nivel mundial en estos estudios” que hablaba del sentido de coherencia a partir de la autogénesis,  recursos generales de resistencia, algo tan sencillo como reconocer los factores biológicos materiales eco sociales espirituales, culturales por nombrar algunos, que nos simplifican el día a día.

Consultado sobre nuestras herramientas con las que podríamos contar para enfrentar el estrés, lo que nos está sucediendo, para canalizarlo de una manera que no sea a través de la violencia a las frustraciones, Núñez dijo que ellas son básicamente tres, una es la comprensibilidad, es decir, comprender la dimensión, y  esto es a nivel cognitivo; comprender qué cuestiones nos suceden en el día a día, y la otra, es la manejabilidad porque, hay gente que no identifica las cuestiones,  simplemente las atraviesa, las sufre, pero que todo tiene una raíz, y que, entonces hay que comprender de dónde viene ese sufrimiento, qué me lo está generando, la manejabilidad es el componente que nos permite disponer de esos recursos, algunos materiales, espirituales, emocionales para enfrentar las situaciones. “Todos tenemos nuestra fortaleza, debemos descubrir cuál es”, remarcó,  Y dijo que el tercero, es la significancia, que es la dimensión motivacional, eso que muchas personas dicen: “hay que poner voluntad hay que poner deseo”. Explicó que hay una realidad, que a veces el deseo puede no estar,  la voluntad también puede estar como no estar, y que debemos hacerlo a partir de la conducta, y que esto es un reentrenamiento constante de la vida, justamente poder estar, desde tratar los temas en el día a día, desde una cierta manejabilidad cierto significado, cierta comprensión, y que no debemos estar tan “aerostáticos”, tan elevados, sino ser más terrenales en esto. Insistió en que tenemos los recursos a mano y que debemos,  que es la oportunidad ahora de identificarlos y trabajar en el día a día con ellos.

Desde el sufrimiento extremo, como pueden ser las guerras, de esas situaciones extremas, es donde comenzaron a visibilizarse justamente los recursos más simples, que a la vez han sido los más ignorados, reveló.

Acerca del aporte de la tecnología, por ejemplo que pudo ayudar a comunicarnos, vincularnos, a sentirnos menos aislados durante la Pandemia, El Psicólogo sostiene que la comunicación es esencial por el medio que sea, para sobrellevar esa situación, en la que la sensación de frustración que brinda el aislamiento, el no saber qué hacer, genera hasta escenarios de violencia, y que por eso la comunicación es esencial. Y recordó una frase de nuestro Director que rezaba que “La comunicación es una vocación de servicio” y justamente, dijo que tiene que ver con eso, en la importancia de los comunicadores, en el lugar que tienen, porque uno también observando aprende, y que esto lo que nos otorga como estímulo el caos, las situaciones críticas o estresantes.

 

Redacción ; Prof. Cita Litvak

Escuche la nota completa