El 4 de octubre de 1936, grupos anti fascistas de Londres– judíos, comunistas, anarquistas y otras minorías- se enfrentaron con la Policía Metropolitana de la ciudad, que acompañaba una marcha organizada por los miembros de la Unión Fascista Británica, liderados por Oswald Mosley. Los manifestantes fascistas desistieron y abandonaron la marcha, al ver que los 100.000 anti fascistas no desistieron en el enfrentamiento.
Los efectivos se encontraron con más de 100.000 manifestantes anti fascistas – judíos, comunistas, anarquistas y otras minorías -que habían levantado barricadas desde el extremo oriental de la calle hasta el occidental.