Villa Dominguez

Visitas, recuerdos, testimonios y emociones

En el departamento Villaguay, corazón de la provincia, a 20 kilómetros de la cabecera departamental se ubica la localidad de Villa Domínguez. Allí, en 1985, surgió una valiosa iniciativa para rescatar y preservar el patrimonio cultural de una de las experiencias más emblemáticas de la historia nacional argentina. Se trata del Museo de la Colonización Judía del Centro de la provincia de Entre Ríos.

Enraizado al proceso de colonización judía, en esa zona y en otras del país, entre fines del siglo XIX y la Primera Guerra Mundial, este lugar que irradia historia, cultura, preguntas y respuestas fue fundado el 19 de octubre de 1985 con el apoyo de la Junta de Fomento de Villa Domínguez.

Luego de varias mudanzas, en 1996 el museo comenzó a funcionar en el antiguo boticario que le rinde homenaje al doctor Noé Yarcho, “El Médico del Alma”, de profundo compromiso con el pueblo en épocas de epidemias, que incluso se llevó la vida de su pequeña hija. Hoy en su memoria el hospital de Domínguez lleva su nombre y se conservan para su exhibición los objetos donados para conformar la colección.

Una mirada visionaria

El director del museo, Osvaldo Quiroga, desde muy joven se interesó por la colectividad judía, a pesar de no pertenecer a ella. En su afán por conocer los pormenores, se dedicó a recolectar casa por casa elementos para constituir este espacio de altísima trascendencia mundial como lugar de consulta e investigación con documentos, objetos y fotografías, que contrariamente al enfoque de detener el tiempo en un instante, son aperturas para ahondar en puertas que se abren con la información que muestran.

El Museo de las Colonias ofrece una recorrida por el pueblo y su entorno, algunos edificios emblemáticos conforman una propuesta que amplifica las posibilidades de los visitantes para tomar contacto con testimonios relevantes sobre la historia del lugar. La estación de trenes; el galpón de inmigrantes —que funciona como anexo del museo—; el edificio del Fondo Comunal; la sinagoga; el hospital; la fábrica de aceites vegetales; y la traza urbana, de diseño único de su tipo en la zona, ya que fue diseñada al estilo parisino, con rotondas y bulevares.

La distribución de las parcelas y colonias en los alrededores, restos de sus edificaciones y los cementerios, muestran la organización sumado a este importante museo de la provincia de Entre Ríos, cuyo patrimonio recibe donaciones de materiales de las escuelas, bibliotecas y familias del lugar, además del rescate excepcional de documentación. Su sede ha sido beneficiada con refacciones impostergables en el edificio gracias a los aportes de organizaciones y de benefactores particulares.

El valor dentro del contexto

En los albores del siglo XXI, las propuestas de este museo fueron integradas al circuito turístico de las colonias judías, auspiciado por el gobierno nacional y provincial, lo que permitió despertar aún más la inquietud de instituciones escolares judías que llevan a los estudiantes a conocer el lugar desde distintos lugares del país y producen el efecto multiplicador, a través del “boca a boca”.

Historiadores, estudiantes, docentes, integrantes de familias, que buscan su identidad, son recibidos junto a contingentes del exterior y personalidades de todo nivel que llegan para, en muchos casos, emocionarse y sorprenderse con este espacio de memoria y conexión con una energía que atrae la visita de turistas como parte del recorrido por las colonias y otras localidades del circuito histórico.

El contacto internacional posibilita la digitalización

El director Quiroga participó el año pasado en Nueva York de una jornada dedicada a los aportes de la comunidad judía a la formación y desarrollo de la República Argentina, donde fue disertante.

Silvia Hansman, directora del Archivo IWO (Instituto Judío de Investigación) participó en Villa Domínguez, desarrollando un trabajo junto a su colega Osvaldo Quiroga, en el que implementó un proyecto conjunto de digitalización de diarios empezando por “El Colono Cooperador”, una revista que fue el órgano de difusión de la Fraternidad Agraria entre 1917 y 1992.

Este proyecto de digitalización se realiza mediante un convenio entre cuatro organizaciones: la Fundación IWO; el Museo de Villa Domínguez; la Asociación Civil y Cultural Tzavta; y la Biblioteca Judaica a nombre de Láser y Rae Prive en la “George Smathers Libraries” de la Universidad de Florida Estados Unidos.

Se digitalizará una colección que aporta información única sobre la vida en las colonias, aspectos culturales y artísticos, debates ideológicos, visitas de políticos, información sobre formas de producción agrícola, estadísticas y mucho más. Parte de este material se imprimía en Villa Domínguez en los talleres gráficos de Moisés Ulfohn y hasta las ilustraciones eran hechas por un artista local llamado Lapiduz.

Visitas, recuerdos, testimonios y emociones

Durante los últimos días recorrieron la ciudad y visitaron el museo integrantes de las familias Monczor-Fingerman-Feinberg de Buenos Aires y desde Lima (Perú) llegó Alejandro, el sobrino biznieto del doctor Noé Yarcho. Alejandro Yarcho, se encontró en esas calles que recorrió su tío bisabuelo que dejó una enseñanza muy profunda y remarcó su vocación en defensa de la vida.

También pasó Marta Wolf, periodista, conductora, escritora y realizadora cinematográfica, quien ha visitado varias veces Entre Ríos, habiendo realizado el libro pionero sobre la historia de la inmigración judía en Argentina, titulado “Pioneros de la Argentina, Inmigrantes Judíos”. De vista por el museo habló sobre el proyecto de una película de las colonias judías: “Hay un retorno judaico maravilloso a pleno sol, abierto, en un mundo tan conflictivo, y yo como judía siento la necesidad de hacerlo”, señaló conmovida.

Más personalidades que visitaron el museo

Cuatro mujeres reconocidas en la comunidad judía también pisaron el suelo de Villa Domínguez: —Irene Munster, experta en investigación de la historia de bibliotecas públicas y privadas de Estados Unidos, llegó especialmente enfocada en las Colonias Judías para realizar un importante trabajo.

—La doctora Graciela A. Fainstein Lamuedra, investigadora del Centro de Ciencias Sociales y Humanas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España fue recibida por Osvaldo Quiroga, para investigar documentos de interés para su tarea.

—María Martha Argerich, pianista argentina de una familia judía ucraniana, se estableció en territorio argentino huyendo de los pogromos del siglo XX. Argerich está considerada una de los mayores exponentes de su generación y la posguerra, especialmente en el repertorio de Chopin, Liszt, Bach, Schumann, Ravel, Prokofiev y Rahmáninov. Dio su primer recital con tan sólo cuatro años de edad. De visita al Museo de las Colonias se encontró con los caminos de la historia de su familia.