El sabio Hillel, la derecha y la izquierda

 Todos los judíos, no importa cuál es nuestra ideología política, derecha o izquierda, creemos en la sabiduría del dicho de Hillel, en Pirkei Avot (Ética de Nuestros Padres) 1:14:

 “Si yo no estoy por mí, ¿quien estará por mí? Pero si sólo estoy por mí, ¿quién soy? Y si no ahora, ¿cuando?”

 La diferencia entre la derecha y la izquierda estriba en el énfasis que cada ideología pone en una de las partes del dicho.

 La derecha pone énfasis en la frase “Si yo no estoy por mí, ¿quien estará por mí?” La derecha considera que esta frase expresa su convencimiento de que nuestra defensa y supervivencia tienen prioridad, y que, fundamentalmente, solo podemos confiar en nosotros mismos. Esta interpretación es compartida por una abrumadora mayoría de los judíos en Israel. 

El énfasis de la izquierda está en las frases, “Pero si sólo estoy por mí, ¿quién soy? Y si no ahora, ¿cuándo?” Esto expresa su simpatía a los palestinos, (y en casos de extrema izquierda, su antipatía al sionismo), su disgusto con lo que llaman “ocupación” y su urgencia para aceptar las demandas palestinas de inmediato, tal como lo expresa el nombre de una de las organizaciones israelíes de izquierda, “Shalom Ajshav”, Paz ahora, y el de la organización anti sionista “If not now” (Si no ahora) en los Estados Unidos. Esta interpretación predomina en la gran mayoría de los judíos de Estados Unidos, y en los círculos izquierdistas en Israel.

 Hay muchos judíos en los Estados Unidos, tampoco faltan en Israel, que están convencidos de que el control israelí de Judea y Samaria es una maldad tan inmensa que no se puede aceptar y que es necesario darle fin lo más pronto posible fuese cual fuese el precio que nos cueste, (basta leer a varios de los columnistas de Haaretz, especialmente a Gideon Levy y a Amira Hass). El control de Judea y Samaria, según esos ideólogos, (ver, por ejemplo, los monótonos y repetitivos artículos de Gershon Baskin en el Jerusalem Post) destruye nuestra fibra moral. Hay quienes llegan al extremo de decir que es preferible que Israel no exista a que controle Judea y Samaria.

 Mi ideología personal está expresada en el salmo 118:17 “Viviré y no moriré”, aun si es a costa de que los palestinos, mientras continúen incitando el odio, financiando el terror, exigiendo el regreso de los millones de descendientes de los refugiados del 49, falsificando la historia judía y negando la legitimidad del Estado judío, no tengan aun un Estado (si es que dejamos de lado el hecho de que Jordania tiene mayoría palestina, y que Gaza es un Estado independiente palestino de facto).

 No comparto la ideología izquierda extremista que justifica y simpatiza con las exigencias de enemigos que solo sueñan con exterminarnos.

 Si algo nos ha enseñado la historia judia, es que la supervivencia de nuestro pueblo debe ser nuestra prioridad.
Mi Enfoque # 730 por David Mandel

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