En Parashat Hajódesh se lee acerca del sacrificio de Pesaj que debieron comer los hijos de Israel en la tierra de Egipto y en nuestra haftará leeremos un tema parecido a ese.
En los capítulos anteriores al del fragmento que leemos hoy, el profeta Iejezkel nos había descripto con lujo de detalles cómo será el tercer y definitivo Templo de Jerusalem, y en los capítulos 45 y 46 nos describe cómo serán efectuadas algunas de las ofrendas y los sacrificios a través del “nasí“ (príncipe, representante, dirigente).