«Los Beatles son una histeria que pretende infectar nuestro territorio»
Fue en 1965. El «Comité de la Virtud» no permitió que el cuarteto de Liverpool tocara en Tel Aviv. «Esa banda no tiene ningún mérito artístico, causa histeria y grandes desórdenes» fue la excusa que puso la autoridad moral de Israel, para prohibir que el grupo tocara en Tel Aviv.
No fue lo único que sostuvo esa comisión integrada por 13 miembros y con nombre oficial pomposo: Comité para la Importación de Artistas Extranjeros o CIAE.
«Los Beatles son una histeria que pretende infectar nuestro territorio», dijeron sus integrantes sin imaginar que estaban privando a los israelíes de ver a una de las bandas de música más importantes de la historia.





