El Tribunal Supremo israelí dictaminó este martes por unanimidad el fin de la exención militar para ultraortodoxos, medida que polariza a la sociedad israelí especialmente desde la guerra en la Franja de Gaza, y que pone entre las cuerdas al gobierno de Benjamín Netanyahu, ante el riesgo de que los partidos haredíes abandonen la coalición.
“En medio de una guerra agotadora, la carga de la desigualdad es más dura que nunca y exige una solución”, afirmó el presidente del Supremo, Uzi Vogelman, al anunciar el fallo, a raíz de un recurso presentado en febrero por el Movimiento para un Gobierno de Calidad, un grupo civil progresista, y asociaciones de reservistas y exmilitares.