Bienvenido a AIP, decinos como te llamas y contanos el porque de tu nombre
Los nombres representan nuestra identidad no sólo porque son una manera conveniente de distinguirnos el uno del otro, sino porque nos definen. El nombre que recibimos al nacer no es fortuito. Es, hasta cierto punto, profético. Captura nuestra esencia. Es la llave de nuestra alma.
La palabra en hebreo para ‘alma’ es neshamá. La parte central de esta palabra, las letras del medio shin y mem, forman la palabra shem, que significa ‘nombre’. Tu nombre es la llave para conocer tu alma.