Israel anunció hoy el cierre inmediato de escuelas, institutos secundarios y universidades para contener el contagio el coronavirus, una medida sin precedentes en el país.
«Cerraremos las escuelas y universidades», informó el primer ministro, Benjamín Netanyahu, en una rueda de prensa en la que consideró esta medida «otro paso vital» para frenar la propagación del COVID-19.
El jefe del gobierno en funciones no detalló una fecha para la reapertura de los centros educativos, cuyo cierre , según los reportes se prolongará cinco semanas, e instó a combatir la extensión del virus con la formación de un Ejecutivo de emergencia que acabe con el bloqueo político que vive Israel desde hace casi un año, en lo que se interpretó como un guiño a su rival, el centrista Benny Gantz.
La clausura del sistema educativo por ahora no incluye a guarderías (jardines de infantes) ni centros de educación especial.
Las universidades continuarán el curso académico de manera virtual.
Hasta el momento, 109 israelíes han dado positivo por el coronavirus y dos de ellos están en estado grave.
Los casos de infectados han ascendido paulatinamente los últimos días, aunque no se ha registrado ninguna muerte.
Decenas de miles de personas están en cuarentena como medida de prevención.
Además, el tráfico aéreo del país se ha visto muy reducido por las restricciones impuestas.
El país no permite la entrada a extranjeros y los que ingresan tras demostrar que tienen una residencia en el país, al igual que sus ciudadanos que regresan de fuera, independientemente de su procedencia, deben someterse a un aislamiento domiciliario de catorce días.
Esta medida, que por ahora estará en vigor dos semanas, supone un impacto económico especialmente duro en el sector turístico, que se preparaba para recibir pronto a un gran número de visitantes por las Pascuas judías (Pesaj) y Semana Santa cristiana.
Cien hoteles cerraron hoy y se espera que un centenar más lo haga los próximos días.
El Gobierno también vetó ayer reuniones públicas de más de cien personas, lo que afectará a los actos religiosos o deportivos, y hoy provocó que los principales teatros de Jerusalén y Tel Aviv cerraran sus puertas.
En Cisjordania (Judea y Samaria), estrechamente conectada con Israel por pasos fronterizos y puestos de control, hay 31 palestinos infectados, la mayoría en la ciudad de Belén, que permanece bloqueada desde hace casi una semana.
En la Franja de Gaza, sin embargo, aún no se ha registrado ningún caso.
EFE y Aurora