Investigadores del Instituto Tecnológico Technion y del campus de cuidados de salud Ramban han presentado un método que permite el examen masivo de muestras de pacientes que podrían haberse infectado de coronavirus.
Hoy en día el Ramban debe analizar individualmente hasta 1200 muestras diarias, lo que impide la detección de casos asintomáticos y además implica un consumo de tiempo y recursos que no ayuda en la lucha contra el COVID-19.
La novedad de esta prueba, desarrollada en menos de cuatro días, radica en que la nueva técnica ha logrado verificar a escala molecular hasta 60 muestras a la vez, dando lugar a la detección de los peligrosos casos asintomáticos que pudieran contaminar, masiva e inadvertidamente, a una gran cantidad de personas.
Se espera que este avance ayude a aplanar la curva de infección y ralentizar la pandemia para que pueda ser atendida por la capacidad hospitalaria.”Recibimos aproximadamente 200 muestras de prueba COVID-19 por día, y cada una se somete a un examen individual”, dijo el Dr. Yuval Gefen, director del Laboratorio de Microbiología Clínica Rambam.
“Con el nuevo enfoque de agrupación que hemos probado actualmente, las pruebas moleculares se pueden realizar en una muestra combinada de 32 o 64 pacientes. De esta manera podemos acelerar significativamente la tasa de prueba. Solo en esos casos raros, donde la muestra conjunta es positiva, realizaremos una prueba individual para cada una de las muestras específicas”, explicó.
Los investigadores adviertieron, sin embargo, que por ahora existen algunos retos logísticos para la implantación de la prueba.
En esta misma línea, el Ministerio de Salud de Israel ha desarrollado y puesto en marcha una aplicación de teléfono celular que funciona por geolocalización y advierte si uno está cerca de algún contagiado por el COVID-19. El programa, denominado “Maguen” (Escudo, en hebreo), se puede descargar gratuitamente de la página web de Salud y ha sido desarrollado para contener la propagación de la enfermedad