A consecuencia de la cuarentena se han restringido la libertad de movimientos de los ciudadanos, esto ha generado que prácticamente no se pueda salir a la calle, y esta situación a creado una nueva clase social, la Gestapo Balconera. Gente, que al parecer anda bien alterada, que se dedica a insultar a gritos desde su balcón (o ventana) a cuantos ve por la calle.
A pesar de las restricciones de movimiento, personas con discapacidad o determinadas condiciones que requieren salir a la calle, sí o sí, de forma periódica, están exentas de este encierro, por supuesto cumpliendo una serie de normas y bajo una serie de circunstancias (ver aquí las normas).
Sin embargo, algunas familias que tienen hijos con autismo y que, cumpliendo a rajatabla las normas, han salido a la calle con sus hijos por necesidad manifiesta, han sido increpados y gritados por los miembros de la Gestapo de los balcones, y eso les creó miedo, y se han producido muchas quejas en redes sociales por este tema. La cuestión es que pensaron que identificar a sus hijos quizá fuera la forma de evitar que los miembros (y miembras) de la Gestapo de los balcones les griten.
Y pensaron que poner un brazalete azul a sus hijos los identificaría y la gente dejará de gritarles. Dudo mucho que los miembros de la Gestapo Balconera entiendan lo del brazalete, y si lo hacen, peor, no sea que luego te obliguen a llevarlo siempre.
En mi opinión eso vulnera los derechos de la persona, a NADIE le interesa si tu hijo tiene autismo o caspa, eso es parte de su privacidad, si alguien te grita, LLAMA TÚ A LA POLICÍA, lo que hacen por cierto es un delito, DENÚNCIALOS. Cambia tu miedo de bando.
En la Alemania Nazi les pusieron estrellas bordadas en le pecho, y luego llegó el Aktion T4, ¡qué poco hemos aprendido de la Historia
DANIEL COMIN