La Libertad del Encierro

Hace días que estamos adentro, guardados, aislados. Para muchos esta situación se traduce como un “encierro”. Si pensamos en la definición de la RAE, encierro es: “Reclusión de una persona en un lugar, en especial si es de forma voluntaria o si se hace como acto de protesta.”

Con lo cual técnicamente podríamos decir que estamos encerrados, sin embargo es importante destacar la connotación que socialmente tienen las palabras. Seguramente esta definición genera sensaciones de ahogo, de claustrofobia y hasta de angustia y miedo. Vivir aislados puede generarnos todo eso, pero también puede generarnos muchas otras cosas.

Las palabras tienen un efecto muy potente sobre nuestras emociones, que a su vez, condicionan nuestras acciones y por ende nuestros resultados. Repetir la palabra encierro, prisión o atrapados, nos trae la famosa imagen de un preso en su celda, tachando palitos en la pared para llegar al día de su libertad. Y eso no hace mas que generarnos emociones disfuncionales para el transcurrir de nuestros días actuales.

Contar cuantos días nos quedan para terminar el aislamiento nos juega una mala pasada, nos hace perseguir un objetivo que no tiene fecha cierta de llegada y que no depende de nosotros. Seguramente provoque ansiedad y temor por ver que ese día esperado se extiende y aun no llega.

Lo que si llega es Pesaj, la festividad en la que se conmemora la liberación del pueblo judío de la esclavitud del Rey egipcio y seguramente nos preguntamos Cómo se puede conmemorar la libertad estando encerrados?

Creo que la tecnología en esta etapa es una aliada para poder transitar estos días lejos, y al mismo tiempo, cerca de la familia, los amigos y los compañeros de trabajo, entre otros. Asimismo es importante destacar que la sensación de libertad o de encierro está en nuestra mente.

En la vida nos suceden muchísimas cosas y aunque parezca que no tenemos posibilidad de elección, siempre vamos a poder elegir COMO vivir esas situaciones.

Estamos por festejar la libertad, y costó muchos años cambiar la mentalidad de prisioneros para entender la liberación y vivirla como tal. Hoy estamos ante una excepción mundial que nos desafía a mantener y festejar la libertad en el interior de nuestra casa, y recordando siempre que aun tenemos la libertad de elegir cómo vivir estos días. Sonriendo, enojados, ansiosos, tristes, productivos o el alegría… podemos decidir cómo llevar adelante nuestro aislamiento.

@micaela.mentoring

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