Alemania conmemoró este sábado el 75 aniversario de la liberación del campo de concentración nazi de Buchenwald. Pero lo hizo de forma virtual, debido a la pandemia del nuevo coronavirus.
El campo de Buchenwald, y el aledaño y menos conocido de Mittelbau-Dora, fueron liberados por el Ejército estadounidense durante las últimas semanas de la II Guerra Mundial, en su marcha hacia Berlín.
Uno de las fórmulas elegidas para la conmemoración ha sido la publicación de la Declaración de Turingia, en la que se insta a defender «una y otra vez» los «Derechos Humanos, la democracia y la libertad», que «no están en absoluto garantizados a pesar de la experiencia del nacionalsocialismo».
«75 años después de la liberación, recordamos la barbarie y los crímenes de la Alemania nacionalsocialista», arranca el texto promovido por la Fundación en Recuerdo de Buchenwald y Mittelbau-Dora, suscrito por políticos, jueces, escritores, profesores universitarios.
La declaración advierte de que, pese a las lecciones de la victoria sobre el nacionalsocialismo, «el radicalismo de derecha y el autoritarismo están en auge, así como el sentimiento de superioridad étnico, el nacionalismo y el socavamiento de la unidad de Europa».
La fundación había organizado una serie de actos durante la semana previa al aniversario para conmemorar el 75 aniversario, a los que tenían previsto asistir 42 sobrevivientes de 14 países, pese a su avanzada edad.
«Debido a la propagación del coronavirus nos vimos forzados a suspender todos los actos de conmemoración», reconoció el director de la Fundación en Recuerdo de Buchenwald y Mittelbau-Dora, Volkhard Knigg, en un comunicado.
El 11 de abril de 1945, el Tercer Ejército de los Estados Unidos liberó los campos de concentración de Buchenwald y Mittelbau-Dora, ambos en los alrededores de Weimar, a menos de 300 kilómetros de Berlín.
Buchenwald era uno de los mayores campos de concentración en territorio alemán. La fundación estima que unas 266.000 personas de toda Europa estuvieron encerradas en este centro durante el III Reich, de las que murieron unas 56.000.
EFE