Con hámsteres saludables y políticos felices, la investigación del estado judío avanza a toda máquina y alardea de un gran avance.
Un equipo israelí fue tomado en cuenta en el informe periódico de la Organización Mundial de la Salud sobre los esfuerzos internacionales de vacunación.
En lo que se cree que es la primera aparición de científicos israelíes en el «panorama de las vacunas candidatas de COVID-19», el Instituto de Investigación Biológica de Israel y el Instituto de Ciencia Weizmann obtuvieron un lugar en la lista por su trabajo conjunto en el diseño de una vacuna.
Esto se produce inmediatamente después de un gran avance en su intento de producir una vacuna contra el nuevo coronavirus. El equipo israelí es uno de los 149 que aparecen en el documento.
Entonces, ¿cuál es el avance que está llamando la atención hacia los investigadores israelíes y qué tipo de vacuna están planeando? ¿Por qué un instituto clandestino detrás de la investigación sale a la luz? Finalmente, ¿qué otras vacunas hay en la cartera israelí?
¿Cuál fue el avance reciente?
Hace una semana y media, científicos de Ness Ziona, cerca de Tel Aviv, revelaron que habían diseñado una vacuna y la habían probado en hámsteres. Escribieron que una dosis única «fue capaz de proteger a los hámsteres contra el SARS-CoV-2».
Están confiados porque, entre otros factores, los hámsteres vacunados perdieron menos peso corporal después de la infección que los hámsteres no vacunados, y también tenían pulmones más saludables.
No publicaron la investigación en una revista revisada por colegas, que se considera el estándar de oro de la investigación científica, pero presentaron sus datos y su análisis en un repositorio de artículos en línea.
¿Quién está detrás de la vacuna?
Hay varios equipos de vacunas en Israel, pero ninguno está recibiendo tanta atención de los políticos como este, ya que proviene de un aclamado instituto dirigido por el Ministerio de Defensa.
El Instituto de Investigación Biológica de Israel es un establecimiento medio secreto que normalmente no revela casi nada sobre su trabajo. Los analistas políticos se han quedado asombrados por la medida en que repentinamente, durante la pandemia, se ha expuesto al público, con líderes que constantemente hablan de su trabajo e incluso lo visitan.
«Es como si de repente comenzáramos a recibir actualizaciones sobre lo que está haciendo el reactor nuclear en Dimona», dijo recientemente al The Times of Israel Yonatan Freeman, experto en relaciones internacionales y seguridad nacional de la Universidad Hebrea de Jerusalén.
¿Qué tipo de vacuna es?
La vacuna se basa en el virus de la estomatitis vesicular (VSV), un virus animal que ya se ha utilizado en una vacuna contra el Ébola lanzada recientemente. Implica alterar la composición proteica del VSV: reemplazar la glucoproteína del VSV con la proteína espiga del SARS-CoV-2.
Al hacer esto, dijo el equipo de investigación, se les ocurrió una fórmula que hace que los hámsteres – y esperan que los humanos – induzcan la producción de anticuerpos neutralizantes que pueden proteger contra el SARS-CoV-2.
Los políticos están entusiasmados, ¿pero lo están los científicos?
Sí. Algunos de los principales expertos de Israel en vacunas y virus han quedado impresionados por los resultados publicados por el Instituto Biológico.
«Lo leí cuidadosamente, y lo que produjeron fue muy bueno», dijo el microbiólogo Herve Bercovier al Times of Israel.
Bercovier, ex vicepresidente de investigación y desarrollo de la Universidad Hebrea de Jerusalén, quedó impresionado de que el diseño de la vacuna utiliza una especie de atajo, esto es, el modelo VSV.
Él piensa que fue inteligente usar este modelo, con su buen historial del Ébola, y dice que esto inspirará la confianza de los médicos y reguladores. «Tienes una plataforma que ya está aprobada», señaló.
¿Existen críticos?
El profesor Jonathan Gershoni, de la Universidad de Tel Aviv, que está tratando de desarrollar su propia vacuna basada en un modelo recientemente patentado, le dijo a The Times of Israel que tiene algunas críticas sobre el diseño del Instituto Biológico.
Dijo que los hámsteres vacunados en la investigación del instituto no retuvieron el peso corporal tan bien como esperaba, ya que su masa era más baja que la de los hámsteres no infectados. También dijo que uno de los hámsteres vacunados en el estudio tenía señales de infección en el pulmón.
Siendo ese el caso, cree que los datos en el trabajo de investigación no respaldan sus afirmaciones, y cree que la vacuna en desarrollo tiene beneficios, pero que «no son dramáticos».
¿Qué sucede ahora?
El instituto está muy lejos de producir una vacuna humana probada y aprobada. Se necesitan varias etapas de prueba primero. Es por eso que los líderes de Israel están cubriendo sus apuestas – continúan apoyando este y otros esfuerzos de vacunas de cosecha propia, mientras firman un acuerdo para comprar una vacuna que está desarrollando la empresa estadounidense de biotecnología Moderna.
El famosamente largo proceso de aprobación podría ser acelerado para el Instituto Biológico en virtud del precedente del Ébola para la plataforma de vacunas, dicen algunos expertos.
Cyrille Cohen, directora del laboratorio de inmunoterapia de la Universidad de Bar-Ilan, dijo a The Times of Israel: «Si se conoce una plataforma, es posible utilizar la toxicología – datos necesarios para verificar posibles efectos nocivos – de otras vacunas basadas en la misma tecnología, para acelerar la primera parte del proceso de aprobación».
¿Qué otros proyectos de vacunas están en progreso?
Una vacuna oral que se está desarrollando en Galilea fue una de las primeras en informar progreso, en marzo. El Instituto de Investigación Migal Galilee, financiado por el estado, tuvo una ventaja inicial porque ha estado trabajando durante cuatro años hacia una vacuna que pueda personalizarse para varios virus. Esta investigación ha dado lugar a una nueva startup, MigVax, que está trabajando en la vacuna oral MigVax-101 COVID-19 para humanos basada en una plataforma que demostró ser una vacuna oral eficaz contra el virus de la bronquitis infecciosa en aves de corral.
El modelo de vacuna de Gershoni también ha atraído inversiones. El mes pasado, Neovii, una compañía biofarmacéutica con sede en Suiza, firmó un acuerdo de investigación y licencia para desarrollar la investigación de Gershoni sobre una «vacuna COVID-19 novedosa y potencialmente salvadora». Su enfoque es apuntar al motivo de unión al receptor (RBM por sus siglas en inglés), una estructura crítica que permite que el virus se una e infecte a una célula objetivo.
Mientras tanto, en el Instituto de Tecnología Technion-Israel, Avi Schroeder está desarrollando una vacuna para el coronavirus basada en un aditivo que desarrolló, que se agrega al agua para mantener sanos a los camarones. Está siendo comercializado por su startup del Technion, ViAqua Therapeutics.
Fuente: The Times of Israel
Traducción: Consulado General H. de Israel en Guayaquil