Se estrena Perón y los judíos, del periodista y realizador Shlomó Szlutzky, quien se propuso con su filme, ubicado en el recuerdo de su propio padre, indagar en la relación de los argentinos, los judíos y el peronismo.
Cuenta Szlutzky que su padre era una persona progresista, humanista, trabajadora desde muy joven, que pertenecía a un grupo de personas que activaba en Hebraica, en el grupo de teatro en el que estaban gente como David Stivel, Juan Carlos Gené, Sergio Renán, y también con Gerardo Mazur, un “adalid de la cultura y de los derechos humanos”.
Por eso no puede entender cuando en estos últimos años algunos de sus amigos, frente a alguna discusión entre la dirigencia comunitaria judía y el kirchnerismo, declaren que “los judíos vuelven a ser como los gorilas de los años ’40 – ‘50, y que califiquen a su padre, ese hombre progresista, como un “gorila”. “Otro se hubiera agarrado a las trompadas, frente a ese insulto, yo decidí hacer una película y poder indagar sobre el tema”, afirmó. Se dispuso averiguar entonces, “si corre por sus venas un ADN gorila”, o si las cosas no se entienden como debería ser, o si hay diferencias entre datos y sensaciones. En eso se basa su película, que si bien trata sobre el pasado, resuena bastante en el presente, en la “grieta” que vive la sociedad argentina.
“Hay un problema que es el de no poder escuchar al otro, no podemos salir del fanatismo y ver al otro”, declara. Y expone: “Hacia finales de 1940, principios de la década de los ‘50 , la generación de jóvenes judíos no votaba a Perón, pero eso no significaba que fueran de derecha, eran en su mayoría socialistas, se identificaban con Palacios”.
Para su padre, también, el dirigente socialista era un referente, pero explica el periodista que hay que entender que en esos momentos, en el contexto de la Segunda Guerra Mundial, año 1946, aparece el GOU, (Grupo de Oficiales Unidos) en el que estaba Perón, y que los judíos, hijos de aquellos que se vinieron a refugiar a la Argentina de la persecución nazi, y que de pronto veían a un general popular que movía a las masas y que no le declaraba la guerra al Eje nazi, producía temor y veía su situación muy problemática. Hasta el año 1947, había un tal Peralta como jefe de inmigración y “era un antisemita y racista”, cuenta Szlutzky, y que aunque ya después lo separaron del cargo y que Perón y Evita hicieron grandes esfuerzos por conquistar los corazones judíos, los errores de la primera etapa no fueron olvidados por muchos judíos.
Con la caída de Perón, así como en toda la Argentina se prohibió nombrar al peronismo, al partido y a Perón, dentro de la comunidad judía, pasó lo mismo, tal vez por ser los judíos una minoría que intenta siempre resguardarse de los peligros, “se acoplaron al nuevo régimen y quizás al extremo de borrar todas las buenas relaciones que había habido durante el peronismo”, sostiene el realizador.
El documental se va a presentar el 24 de septiembre a las 22, se repetirá el sábado, en el mismo horario en Cine.ar TV, y a partir del 25, y por una semana, se podrá ver de manera libre en la página web cine.ar; y para quienes estén interesados, están organizando un zoom junto al realizador, para el sábado 3 de octubre a las 18.
Por último, Shlomó describió la situación de este particular Rosh Hashaná en Israel: “Terminamos el año y empezamos la cuarentena”, dijo. Y declaró con tristeza que “pasaron a ser, de un país a quienes todos consultaban sobre cómo manejar la pandemia, a un país rojo por el nivel de contagios”. Y señaló que las decisiones tomadas, tienen que ver con el covid, pero también con la política: “Lamentablemente cuando el gobernante que uno tiene está frente a un juicio por varias causas de corrupción, nunca se puede estar seguro de que las decisiones que se toman sean solo por cuestiones de salud”, concluyó.
Radio Jai