Halloween es una festividad muy controvertida para las comunidades judías en el mundo y especialmente en Estados Unidos. La primera dificultad es que el origen de esta festividad no es muy claro, a la vez puede ser vista como un ritual pagano, una celebración cristiana y un evento cultural europeo o estadounidense que se ha expandido y hecho popular en el mundo. Por ello los rabinos de las distintas comunidades han dado respuestas diversas a si uno como judío tiene permitido celebrar Halloween o no. Y aunque una gran mayoría de rabinos han descartado esta festividad como un ritual en el que los judíos no deben participar, en muchísimos países culturalmente la gente ha optado por sí participar en ella. Por eso la respuesta de las comunidades y los individuos ha sido diversa en cada caso y nos gustaría explorarlo a profundidad.
Rechazo a la festividad y las razones tanto halajicas como culturales para prohibirla
La gran número de rabinos ortodoxos y conservadores han pedido a sus comunidades que no permitan a sus participar en las celebraciones de Halloween, para estas personas hay razones muy claras por las cuales un judío no debería participar en las festividades. Desde el punto de vista halajico Halloween entra en conflicto con algunas premisas judías. Algunos rabinos lo prohíben por su origen cristiano, otros por su origen pagano, otros por la prohibición de imitar las costumbres de los pueblos que nos rodean y finalmente algunos lo hacen porque en Halloween existen numerosas referencias a elementos prohibidos por la Torá como brujería, adoración a la muerte y los fantasmas y elementos de por el estilo, que aunque la festividad al ser cultural no caen dentro de ellos pues realmente nadie revive muertos, ni hace brujería real en Halloween, de todas formas convierten a la festividad en un elemento no propio desde la visión halájica de estos rabinos.
Por su lado hay otros rabinos que mantienen que el problema de Halloween no es en sí un problema halájico sino un problema educativo. Ellos concuerdan que hoy en día Halloween está tan separado de sus orígenes como para ser un problema. Sin embargo, concuerdan con que no es benéfico participar de la celebración porque es una festividad ajena al pueblo judío y cuya filosofía no necesariamente va acorde a los principios judíos, por eso invitan a las congregaciones a abstenerse de dicha celebración.
Aceptación de la festividad desde la halajá y desde otros ángulos
Hay rabinos que sostienen que no hay razones por las cuales la halajá deba prohibir la celebración de Halloween. Para ellos el origen probablemente idolátrico de la celebración no es en sí un problema porque no es claro que ése sea realmente su origen. El nombre de Halloween en realidad proviene de “All Hallows Day Eve” que en inglés quiere decir “El día de todos los santos” dentro del catolicismo era un día designado para celebrar a los santos y aunque en la cristiandad hay ciertos elementos que para el judaísmo son idolátricos como la Trinidad y la Encarnación de D-os, los santos no son idolatría propiamente porque los santos simplemente son hombres justos y cercanos a D-os y el judaísmo reconoce la presencia de hombres justos y sabios en todas las naciones. Por estas razones para muchos rabinos Halloween no es en sí idolatría más aún porque hoy en día en la forma que se celebra Halloween es completamente cultural la gran mayoría de la gente no realiza misas ni rituales, ni ningún tipo de celebración religiosa en el día. Esta postura depende completamente de cómo se ve la cristiandad por el rabino, hay rabinos como el Rambam que rechazan la totalidad de la cristiandad como idolatría, para estos rabinos dicho argumento halájico no es válido, sólo lo es para aquellos que aceptan que sólo ciertos elementos de la cristiandad son idolátricos (como lo hicieron gran parte de los rabinos alemanes del siglo XIX)en cuanto a su origen pagano, el problema sería que se realizarán celebraciones adorando algún dios pagano o algún elemento natural y al parecer no era el caso de la celebración celta, sino era más bien una celebración agrícola en la cual se ahuyentaban los malos espíritus y la mala suerte. Además hoy en día Halloween está tan separado de dicho origen que ni siquiera se conoce históricamente la naturaleza de los rituales que se practicaban y por eso su evolución al Halloween que conocemos hoy en día fue tan fácil y tan distinto en cada región. En cuanto a su relación con la brujería se acepta que es una farsa o un juego y no se realiza brujería realmente, por ello muchos rabinos sostienen que no existe un problema halájico como tal y aceptan la celebración de Halloween como otra celebración cultural del país en el que viven como el Día de Acción de Gracias (Thanksgiving) o el Día de la Independencia.
Cabe destacar que el argumento halájico más aceptado por aquellos que permiten celebración de Halloween es que hoy en día la celebración no mantiene ninguna de sus raíces ni paganas, ni cristianas.
Sin embargo, en cuanto a la halajá también existe un problema de romper la tradición del lugar y la forma de actuar del grupo judío predominante. Al final la decisión depende de la comunidad a la que uno pertenezca hay comunidades más estrictas que otras, la comunidad mexicana por ejemplo es muy reticente a la idea de aceptar esta celebración, mientras que muchos grupos estadounidenses sí la han aceptado.
Ignorar el dilema
Muchísimos judíos están tan integrados a la sociedad que los rodea y aceptan con tanta naturalidad que Halloween es una festividad cultural que ni siquiera se preguntan si hay un problema y han celebrado Halloween con su familia desde pequeños. Ésta es la situación de la gran mayoría de judíos estadounidenses y lo fue durante muchos años. En el siguiente articulo la autora analiza revistas, periódicos y documentos judíos sobre cómo se veía la celebración y muestra que realmente el dilema inicio en épocas recientes. Las comunidades judías no solían prestarle atención especial a Halloween a diferencia de otras festividades cristianas de las que sí deseaban separarse.
Incluir elementos judíos a la celebración
Como es natural en culturas y sociedades con una población judía numerosa en Estados Unidos y otros países empezó a ocurrir que Halloween tomó elementos judíos. Al preparar sus casas para Halloween los judíos empezaron a incluir elementos judíos en las decoraciones, los dulces, los disfraces y la música. También como es un elemento tan común en la cultura judía estadounidense que casi todos los personajes de series y películas judías aparecen celebrando Halloween.
Sin embargo, ha habido otras formas en que los judíos se han integrado a la celebración tratando de hacerla más judía conscientemente, hay personas que utilizan a Halloween para enseñar valores judíos a sus hijos e incluso hay comunidades reformistas y reconstruccionistas que han incluido a Halloween dentro del calendario judío, dándole otra fecha y haciendo costumbres parecidas a Halloween, pero infundadas de valores y momentos judíos; como hacer “lámparas de Jacobo”.
Aranza Gleason / enlacejudio