El embajador argentino Sergio Urribarri tuvo un encuentro con Jorge Diener, Director Ejecutivo del Hospital Hadassah de Jerusalem -uno de los centros que forma parte de las investigaciones- para hablar sobre posibles acuerdos. El fármaco está en fase de desarrollo en el Instituto Biológico de Israel.
El Gobierno inició conversaciones en Israel que confirman su manifiesto interés en la vacuna que se investiga allí, y que aún se encuentra en fase de desarrollo. Las fuentes argentinas consultadas señalaron además, que buscan posicionarse ante el caso de que el fármaco israelí alcanzara un estado de aceptación exitoso, además de su aprobación y disposición para su comercialización y exportación.
Diener le explicó a Urribarri el estado del desarrollo de la vacuna, cuya investigación está en manos del Instituto Biológico de Israel. Además, advierten que para firmar cualquier tipo de acuerdo, faltan semanas, e incluso meses.
Hasta el momento, Israel es el país que más vacunó a su población, con más de cinco millones de vacunados, lo que representa el 45 por ciento del total de habitantes.
Aún así, los israelíes, que tienen uno de los desarrollos de las ciencias más elevados del mundo, consideran central el desarrollo de una vacuna propia, teniendo en cuenta el alto nivel de demanda que se necesita para disminuir el ataque del virus. Afirman que serían dos dosis cada seis meses por persona.
Urribarri y otros miembros de la Cancillería argentina hicieron este recorrido por el Hadassah. La prestigiosa institución ya tiene convenios con establecimientos argentinos como el Hospital Garrahan y otros. Actualmente es uno de los centros israelíes que ya tiene acuerdos de cooperación con el Instituto Biológico, el que investiga desde hace meses la vacuna anti COVID.
Según fuentes israelíes diplomáticas, “la vacuna israelí está aún en Fase II. Es prematuro hablar de su llegada a la Argentina puesto que necesita aún pasar la Fase III y pasar proceso de aprobación tanto doméstico como internacional. No descartamos la posibilidad de que puedan llegar a la Argentina, luego de todo el proceso que queda por delante, pero enfatizamos que es temprano aún”.
Hadassah es un hospital privado, pero sin fines de lucro, y da servicio a toda la población. Como también hace investigación, y es un centro importante de suministro de drogas farmacológicas a pacientes, atendió a una parte importante de la población infectada de coronavirus. Sobre esa vacuna en desarrollo ya mantiene conversaciones con otros países de la región, como Brasil y México.
Por GS/RJ
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