El economista Hernán Hirsch, dio a los oyentes de Radio Jai un diagnóstico sobre la situación de la economía argentina.
“Tenemos un paciente enfermo con una enfermedad grave, donde la decisión de los médicos es tratar de evitar la operación” remarcó, añadiendo que “cada vez está costando más evitar esa operación, que es cada vez más complicada […] Esta enfermedad está haciendo metástasis, haciéndose cada vez más grave”.
Interpretó que el accionar del gobierno se debe a que tomar las medidas necesarias “implica tomar decisiones que pueden ser muy costosas políticamente para lo que es un gobierno muy debilitado, y que está dentro de una alianza donde es minoría”. “Implica tomar decisiones tan difíciles que ellos mismos tienen la sensación de que si van a tocar al paciente la cosa va a salir mal y ellos pueden quedar afuera”. Sin embargo, resaltó que “en la práctica, no tomar una decisión es tomar una decisión”.
Buscando los orígenes detrás de la no-política del gobierno, explicó que “se remonta a la experiencia del gobierno durante el 2020, cuando la crisis cambiaria de octubre se pasó gracias a que el gobierno esperó y de pronto subió la soja y se levantó la economía”. En consecuencia, “es probable que estemos a la espera de un milagro”, sintetizó.
Aquello ya se vio reflejado en el acuerdo con el FMI, el mismo le dio al gobierno “un veranito, cierta tranquilidad”, tras la cual “con el acuerdo en que se compromete a cierto ordenamiento fiscal y monetario, decide gastar y endeudarse”. De ese modo, “gasta más de lo que estaba acordado con el fondo”, generando un escenario en el que “el gasto público crece a un ritmo del 88% a tasas interanuales”, reflejando claramente que “este gobierno no piensa cumplir el acuerdo con el fondo, solo quiere el acuerdo para gastar más”. Sin embargo, al poco tiempo los inversionistas detectaron la farsa llevada a cabo por el gobierno argentino, decidiendo terminar con la entrega de un préstamo “con lo cual el gobierno se queda sin financiamiento”.
En base a ello, el gobierno incrementó aún más la emisión monetaria, buscando a través de la impresión moneda paliar no sólo el gasto interno sino también el pago de la deuda interna. La consecuencia directa de aquello son mayores niveles de inflación y la decisión de “establecer restricciones a las importaciones”, a fines de reducir el creciente déficit de la balanza de pagos.
“Es un gobierno que quiere seguir gastando para que el nivel de actividad siga siendo alto”, no comprendiendo que “seguir empujando con gasto público no funciona, genera más desbarajuste que los beneficios que podría generar”, remarcó, agregando que “las trabas a las importaciones van a producir más inflación”, por lo cual las problemáticas continuarán acumulándose.
Frente a tal escenario tan desalentador, Hernan Hirsch lamentó: “Es probable que tenga que pasar un milagro, el gobierno se está jugando a un milagro”.
Escuche la nota completa a Hernán Hirsch en Radio Jai.
Redacción gentileza de Tomás Polakoff