En el mes de marzo de 2023 se acaba de incluir una enmienda draconiana en la ley que regula el ingreso a Israel, que le otorga a la autoridad migratoria el derecho de prohibir de manera integral y arbitraria el ingreso de extranjeros al país, incluso antes de que aborden el avión con destino a Israel. La enmienda es sumamente arbitraria, ya que impide la revisión judicial de la decisión de los funcionarios del Ministerio del Interior al negar al extranjero la entrada al país, y exime a los funcionarios de fundamentar las razones de la negativa de ingreso.
La Ley de ingreso a Israel otorga a los funcionarios que realizan el control fronterizo la potestad para decidir si permiten o deniegan la entrada a Israel a los ciudadanos extranjeros que llegan al cruce fronterizo.
Estamos hablando de un tema significativo, ya que, por ejemplo, en 2022, aproximadamente 3 millones de visitantes extranjeros visitaron Israel, la mayoría con fines turísticos, pero algunos de ellos son trabajadores extranjeros, solicitantes de asilo de Ucrania, etc. Para tener dimensiones del problema, en los años previos al estallido de la pandemia, a unos 20.000 extranjeros se les negó la entrada a Israel en promedio cada año.
Los motivos para denegar la entrada a Israel son varios, como por ej. impedir que se establezcan sin permiso y trabajen ilegalmente, motivos de seguridad o antecedentes penales, la pertenencia a organizaciones activistas contra Israel, también por motivos de salud, etc.
Tras la decisión de denegarle la entrada, el ciudadano extranjero recibe una orden de expulsión, en la que se especifica el motivo de la denegación de entrada. Hasta que se efectiviza la expulsión, se retiene a los extranjeros en un centro de detención temporal hasta que se lleve a cabo la deportación y sean devueltos al lugar de procedencia.
Pero lo novedoso del tema es la posibilidad de denegar el ingreso a Israel en el extranjero antes de abordar el avión.
En el mes pasado, la Knesset aprobó la enmienda 36 a la Ley de Entrada a Israel, que permite a la Autoridad de Población rechazar, arbitrariamente y sin motivo, la entrada de un ciudadano extranjero a Israel incluso antes de que haya abordado el avión. Como una especie de control fronterizo temprano y extraterritorial. En tales casos, la aerolínea no permitirá abordar un avión u otro medio de transporte (barco) que esté en camino a Israel.
El principal problema de esta enmienda es la incapacidad del extranjero, que se encuentra en el exterior, para apelar la decisión que le deniega su entrada al país. Ya que no tiene la posibilidad de recurrir a un abogado israelí para presentar un recurso urgente que permita su ingreso.
La denegación de entrada por adelantado, incluso antes de llegar a Israel, bloquea efectivamente los medios legales para discutir esa decisión administrativa. La enmienda a la ley crea una situación en la que el Estado esencialmente evita la revisión judicial de la decisión de denegación.
Es sumamente preocupante el hecho que los funcionarios de la autoridad migratoria puedan decidir prohibir, arbitrariamente y sin necesidad de fundamentarlo, la llegada de extranjeros al país, incluso de manera general en los casos que lo estimen conveniente, como por ejemplo en el caso de una epidemia global, guerra, etc. El listado de motivos de la negativa de ingreso tampoco figura detallado en la ley y, de hecho, las razones quedan a la entera discreción de la autoridad. En los próximos tiempos veremos cómo actuará el estado para implementar la enmienda a la ley que otorga a los funcionarios del Ministerio del Interior una autoridad más amplia para prohibir la entrada al país.
DARIO SYKULER – ABOGADO MATRICULADO EN ARGENTINA E ISRAEL – DIRECTOR SECRETARIO DE LA CÁMARA DE COMERCIO ARGENTINO ISRAELÍ