Reloj marca las horas

El 7 de octubre del 2023, es y será una fecha que ha quedado marcada, no sólo para el Pueblo Judío, dentro y fuera de Israel, sino también para el resto de la comunidad internacional, y ha ratificado o puesto al descubierto, los cinco frentes con que debe confrontar la única democracia en Oriente Medio, en el marco regional.
Los cuatro primeros a abordar, son en el Norte, Hezbollah en el Líbano, en el Este, Siria que más allá de sus propias FF.AA., alberga a combatientes de la Guardia Revolucionaria iraní, de la facción del Hezbollah en Siria y de otras milicias pro-iraníes, y también se podría agregar los elementos terroristas de Hamas y la Yihad Islámica que operan en Cisjordania, por su parte, al Sur están los Hutíes del Yemen y finalmente, en el Oeste, en Gaza, a la columna vertebral de Hamas y al cuerpo principal de la Yihad Islámica.
Veamos sintéticamente, en el caso de la organización político-terrorista Hezbollah, es sin dudas, el más poderoso de los proxis del régimen de Teherán, sus combatientes son entrenados y capacitados, tanto en conflictos asimétricos como convencionales, por la Guardia Revolucionaria iraní, controla las regiones, sudeste del Líbano en Valle del Beeka y en los extremos libaneses del noreste, frontera con Siria, y cuenta con un arsenal importante, se estima en unos 110 mil misiles y cohetes, tanto tierra-tierra como tierra-aire, de distintos rangos, los Al Fajr 3 y 5, de fabricación iraní y C-802 chinos, de largo alcance, misiles sirios de medio alcance, los ya conocidos Katyuska, los anti-tanques Toophan, similares a los estadounidenses Tow, pero guiados por radio y con mayor radio de acción, unas 13 mil piezas de artillería, aviones no tripulados Mahajer 4, vehículos blindados y se calcula que cuenta con cerca de 100 mil combatientes, y con respecto a eventos posteriores al 7 de octubre, se ha limitado a hostigar la región norte de Israel con lanzamientos de misiles y cohetes, que son respondidos por las FDI, pero hasta el momento no sean sobrepasado las acciones de hostigamiento y respuesta israelí, sin olvidar, que a pocos días del ataque e invasión terrorista del Hamas en el sur de Israel, el Secretario Gral. de Hezbollah, el jeque Hassan Nasrrallah, declaró que la organización terrorista libanesa no participaría del conflicto entre palestinos e israelíes, pero debemos recordar, que facilitó las oficinas de su organización en Beirut para finiquitar y aprobar el ataque del 7/10, y que no actúa sin el visto bueno de Teherán, que seguramente le ordenó la no participación directa ante la presencia de la Task Force estadounidense que se trasladó al área del Mediterráneo Oriental frente a las costas libanesas.
En Siria, también está presente Hezbollah, con tropas desplegadas en Alepo, Daraa y Quneitra, que el pasado 9 de este mes, sufrió la baja de Hassan Alí Dakdouk, jefe militar de la organización en la región sur de Siria, y que hostiga sobre los Altos del Golán, con lanzamientos de cohetes y misiles, pero también en terreno sirio hay combatientes de la Guardia Revolucionaria de Irán, que por supuesto cuentan con el apoyo de las FF.AA. sirias, e incluso, también se han desplazados a Siria elementos del Kataeb Hezbollah, rama de la organización libanesa que opera en Irak, y en cuanto a las acciones de Israel en este frente, se centran en respuestas de artillería en la región allende al Golán y a operaciones quirúrgicas de la fuerza aérea israelí en el resto del territorio sirio, que es el corredor de abastecimientos de armamentos y combatientes iraníes o de grupos afines a Teherán.
También, en Cisjordania hay células de Hamas y de la Yihad Islámica, que operan en Jenin, Nablus, Belén y Hebrón, localidades palestinas, y atentados en Jerusalén, ante lo cual las fuerzas israelíes llevan a cabo operaciones selectivas y puntuales.
En cuanto al frente Sur, las amenazas provienen de los Hutíes del Yemen, proxi de Irán, que controla la región de Adén y las costa sur oriental del Mar Rojo, y utiliza drones y misiles de fabricación iraní, muchos de los cuales han sido neutralizados, no sólo por Israel, sino también por naves de las armadas estadounidense y británica, que navegan esa importante ruta marítima.
Obviamente, en lo que hace a la región de la Franja de Gaza, hay una guerra en acto, de la cual estamos todos al tanto de cómo se está desarrollando, con un decidido avance de las FDI, que controlan prácticamente la totalidad del norte de la Franja, y que ha comenzado sus acciones en el sur, en particular en Jan Yunis y áreas colindantes, como Al Jadida o Jarara As Sureij.
Pero el Estado de Israel, también tiene un quinto frente, el interno, pues mientras como se señaló precedentemente va obteniendo los objetivos militares en la Franja de Gaza, en la guerra psicológica parece que es el Hamas quien logra los suyos, por un lado, siguen los ataques de misiles contra las ciudades del centro y sur de Israel, por otro, ponen sus condiciones para la liberación de rehenes, de los cuales no se sabe con cierta certeza cuántos aún siguen con vida, utilizando operaciones de prensa para motivar una presión internacional, con el objetivo de lograr un alto al fuego definitivo.
A esto, debemos sumar la situación creada en el seno de la población israelí, entre si se privilegia la liberación de los rehenes mediante el canje por terroristas presos, o la acción militar hasta lograr sus objetivos, para reconstruir el poder de disuasión de Israel, y tanto una como otra alternativa son exigidas con la misma fuerza y razón por la sociedad israelí.
Esta situación dicotómica, tampoco es ajena a dos circunstancias previas al 7/10, por un lado, la miopía estratégica en pensar que se podría manejar al terrorismo palestino, sea Hamas o la Yihad Islámica, cuando en realidad el objetivo debería ser resolver el problema de plano, pues el resultado hubiera sido, emprender una fuerte acción militar sobre Gaza, pero sin haber lamentado los trágicos eventos de octubre, por otro, quedó demostrada una evaluación equivocada de la situación, pese a contar con Informes de Inteligencia previos, error que quedó evidenciado con la movilización de toda una Unidad de las FDI, del sur de Israel a Cisjordania, un día antes de los ataques del 7/10, en función de priorizar el equivocado paradigma de anexión de dicha región, y tal como se abordó en la columna del 29 de noviembre ppdo., una vez finalizado el actual conflicto, se deberá llevar a cabo una profunda investigación sobre responsables y responsabilidades, y por último, la otra circunstancia es, la crisis política previa, causada por el propio gobierno de Netanyahu, con su proyecto de restarle poder al Poder Judicial, que incluso provocó la reacción dentro de sectores de las FDI, y todo esto, situó a Israel en los umbrales de una guerra civil, todo lo cual, desde el exterior se percibió como una situación crítica y de vulnerabilidad.
Pero más allá de estos cinco frentes, la amenaza existencial concreta y real para Israel, es la República Islámica de Irán, y particularmente, lo que se relaciona con su desarrollo nuclear, cuyo programa está muy avanzado y tendría ya las reservas de Uranio enriquecido suficiente para llevar a cabo un ensayo nuclear, lo que ratifica los Informes de Inteligencia, tanto de Israel, EE.UU. y de las principales potencias occidentales, que además revelan las actividades encubiertas del régimen de Teherán, para la adquisición ilegal de equipos en algunos países europeos.
Esta situación, no sólo se ha documentado en los citados informes, sino también en algunos sitios web de acceso público, como lo es MEMRI o Middle East Media Research Institute, que tuvo acceso a los informes de los servicios de Alemania, Países Bajos y Suecia, que confirman como Teherán ha eludido sanciones y obtenido tecnología para construir armas nucleares, algo que prácticamente ha venido haciendo desde que se abandonó el Acuerdo de Lausana.
Uno de los citados informes de inteligencia, ha corroborado que durante el año pasado, Irán aumentó sus reservas de Uranio enriquecido del 20% y del 60%, las que a través de los nuevos modelos de centrifugadoras, pueden alcanzar el 90%, necesario para un arma nuclear, otro de esos informes concluye que los iraníes han desplegado una vasta red de espionaje industrial sobre los sectores de alta tecnología, y en el caso de Dinamarca, la inteligencia danesa afirma, que Irán adquiere productos y tecnología a través de terceros países, todo lo cual demuestra que las sanciones internacionales impuestas al régimen de Teherán han sido poco efectivas, y queda demostrado que todo esfuerzo de los EE.UU. y las potencias occidentales para conseguir un Acuerdo Provisional, son percibidos por la teocracia persa, como signo de debilidad, lo que no parece advertir la administración demócrata de Biden, que ha insistido en fabricar espacios para retomar las negociaciones, incluso suspendiendo algunas sanciones, pero todo sin éxito.
Pero además, Irán en todo este tiempo ha emprendido un programa de construcción de instalaciones nucleares mejor protegidas de ataques aéreos, lo que se ha verificado a través de imágenes satelitales, como en el caso de una que se está construyendo cerca de la de Natanz, que recordemos fue afectada por una explosión y un incendio en julio del 2020.
Esta nueva instalación, se construye a unos 225 km al sur de la ya nombrada de Natanz, en el interior de la montaña Kuh e Kolang Gaz La o Montaña Pico de Piqueta, donde las imágenes revelan que se han excavado cuatro entradas a los costados de la montaña, dos sobre el lado oeste y dos sobre el este, de unos 6 metros de ancho y 8 de altura, y por el tamaño de los escombros, es probable que alcancen una profundidad de entre 80 y 100 metros, aunque el Instituto de Ciencia y Seguridad Internacional, con sede en Washington, estimó el año pasado, que los túneles podrían alcanzar más profundidad, todo lo cual, indica que se utilizará como instalación subterránea para el enriquecimiento de uranio, lo que haría imposible destruir con armas convencionales y poco probable incluso, con una bomba perforadora de bunker, o la más reciente GBU-57, de EE.UU., que puede alcanzar los 60 metros de profundidad, es más, expertos militares estadounidenses sostienen, que aún con un ataque con dos de estas bombas, arrojadas de manera sucesiva, no está claro el daño que podrían causar.
El otro recurso sería, el sabotaje, que puede afectar el proceso nuclear en el corto plazo, como fue el caso de la utilización del virus Stuxnet, pero no es una estrategia exitosa al largo plazo, pues solamente retrasaría el programa, o la instrumentación de atentados selectivos de científicos involucrados en el proceso, operaciones que ya se efectuaron, pero ambas estrategias, no impedirían que Irán se convierta en una potencia nuclear militar, algo que ya no niegan los altos mandos iraníes.
Finalizando la columna de hoy, en lo inmediato, un enfrentamiento militar directo entre Israel e Irán es poco probable, mientras tanto la teocracia seguirá utilizando sus proxis, seguirá obstaculizando toda posibilidad de Acuerdos entre el Estado Judío y sus vecinos árabes, en particular, con el Reino Saudita, como lo ha logrado a través del Hamas con el ataque del 7 de octubre, pues eso le impediría convertirse en potencia hegemónica regional, mientras tanto el tiempo pasa, y el reloj marca las horas, por eso quizás en el 2017, en la Plaza Palestina ubicada en el centro de Teherán, el régimen de los ayatollah pusieron en funcionamiento un gran reloj, que va marcando el paso de los días hasta el año 2040, fecha señalada para la destrucción de Israel, una amenaza que sólo podrá ser enfrentada, no sólo con la unidad de la sociedad israelí, sino también recobrando su poder disuasorio y con un Occidente que termine por reconocer que Irán es el enemigo principal, tanto regional como global, con su ideología yihadista mundial, por eso la frase elegida es del escritor francés Antoine de Saint Exupery, pero con una puntual modificación, “ Lo esencial es visible a los ojos…de Israel y del mundo.”.-