Por el Emb. Shimon Stein
En una reunión del partido en Londres, en vísperas de su partida para su cuarta gira por Oriente Medio desde que asumió el cargo -una gira diseñada a promover los esfuerzos hacia la estabilidad regional-, el ministro de Exteriores británico, David Cameron, dijo que para fomentar la paz en el Oriente Medio, hay que dar a los palestinos un horizonte político.
Gran Bretaña tiene la responsabilidad de definir «cómo será un Estado palestino, qué comprenderá, cómo funcionará», y los palestinos tienen que ver un «progreso irreversible» hacia la solución de dos Estados, expresó.
Añadió que cuando eso suceda, «nosotros, con los aliados, examinaremos la cuestión del reconocimiento de un Estado palestino, incluso en las Naciones Unidas. Esta podría ser una de las cosas que ayuden a que este proceso sea irreversible”.
Más adelante en su discurso, Cameron insistió en la necesidad de que se establezca rápidamente una nueva Autoridad Palestina, que incluya líderes tecnocráticos que puedan gobernar Gaza.
Tras sus declaraciones, un ministro del Ministerio de Exteriores se apresuró a aclarar que el Gobierno británico no reconocerá un Estado palestino «bilateralmente», pero lo hará en el momento en que la medida contribuya mejor al objetivo de lograr la paz.
Cameron no escatimó críticas a Israel, cuando calificó de fracaso su política de los últimos treinta años.
Según el jefe de la diplomacia británica, aparte de todos los éxitos de Israel en estos años en los ámbitos económico y de seguridad, Israel no ha podido proporcionar lo que un país necesita y lo que toda familia necesita, es decir, seguridad.
Es difícil no ver la intención de Cameron de no posponer el reconocimiento de un Estado palestino hasta el final de un proceso político y anunciar, más bien, la intención de reconocer un Estado palestino ya en una etapa anterior, como una medida diseñada para alentar a los palestinos a tomar las medidas necesarias para las reformas de la Autoridad Palestina.
También es una respuesta a la oposición categórica del primer ministro Netanyahu al establecimiento de un Estado palestino y, en consecuencia, a la integración de la Autoridad Palestina en la gestión de Gaza «el día después».
Cameron ha indicado que el examen y la decisión sobre el reconocimiento se harán junto con los aliados, sin especificar quiénes son.
En este momento no está claro si Estados Unidos, que apoya el establecimiento de un Estado palestino, se unirá a la iniciativa en una etapa temprana.
Es de suponer que esos aliados provendrán de entre los países de la Unión Europea (UE).
Nueve países de la UE apoyan el establecimiento de un Estado palestino.
La negativa del primer ministro Netanyahu a esbozar las medidas políticas al final de la guerra y la dependencia de sus declaraciones sobre lo que no sucederá alienta a países como Gran Bretaña y otros a establecer hechos sobre el terreno que enfrentan a Israel con un hecho consumado, que costará mucho cambiar.
Fuente: INSS – The Institute for National Security Studies