La psicóloga Bárbara Abadi, reconocida por su análisis en psicología social y crítica cultural, explora los intrincados vínculos entre el poder y la perversión.
Abadi, conocida por su enfoque en la ética y la responsabilidad en las relaciones de poder, discute cómo las dinámicas de autoridad pueden desencadenar comportamientos abusivos y qué medidas son necesarias para prevenirlos.
En la conversación, Abadi subraya que “el poder no es intrínsecamente negativo, pero puede ser distorsionado cuando se percibe como absoluto”. Explica que “cuando una persona se ve a sí misma como por encima de las normas y leyes, puede surgir la perversión del poder, donde el otro es tratado como un mero instrumento”.
En este sentido, enfatiza que “la estructura psicológica del individuo juega un papel crucial; no todos los que tienen poder abusan de él, pero aquellos con predisposiciones psicopáticas son más propensos”.
Abadi hace hincapié en la importancia de “sistemas de control y equilibrio que limiten el poder absoluto”, resaltando cómo las instituciones pueden trabajar para mantener la integridad y la responsabilidad incluso en posiciones de alta autoridad”.
Desde su experiencia, concluye que “las relaciones basadas en el respeto mutuo y la empatía son fundamentales para contrarrestar las dinámicas de poder destructivas”.
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