El buque de guerra de la Armada de Irán ‘Sahand’ se hundió por completo dos días después de que se volcara en el puerto de Bandar Abbas, en el Golfo Pérsico, y pese a los esfuerzos para reequilibarlo.
“Sahand, que el otro día fue sacado del agua con gran dificultad y recuperó su equilibrio, se hundió de nuevo después de que se rompiera la cuerda que sujetaba el barco”, informó este martes la agencia Etemad.
El domingo, los medios iraníes informaron que el destructor, que había sido enviado a uno de los muelles de la Industria Marina de Bandar Abbas para su reparación, se había volcado al perder el equilibrio debido a la infiltración de agua en los tanques.
El incidente dejó varios heridos que fueron trasladados al hospital para recibir tratamiento.
Sahand, bautizado así por una montaña en el norte de Irán, es una clase de fragata ligera de fabricación iraní.
El destructor, de 1.300 toneladas y de 95 metros de longitud, contaba una cubierta para helicópteros y sistemas de guerra electrónica, además de estar armado con misiles de crucero antibuques.
La fragata se unió a la flota sur de la Armada iraní en diciembre de 2018, año en que otro destructor naval iraní, el ‘Damavand’, se hundió en el Mar Caspio tras chocar contra un rompeolas. EFE