Anthony Housefather es un miembro del Parlamento canadiense que representa al distrito electoral de Mount Royal en la isla de Montreal. El 30 de enero fue nombrado como secretario parlamentario del primer ministro Justin Trudeau, y ahora, en parte por su pertenencia a la comunidad judía, fue nombrado como asesor sobre la comunidad y contra el antisemitismo.
La medida de Trudeau se da en el marco de una serie de ataques violentos a sinagogas y escuelas judías en el país en solo unas semanas. Por ejemplo, el fin de semana pasado dos sinagogas en Toronto fueron atacadas con ventanas rotas. Y en el mes de mayo hubo un intento de incendio en una sinagoga en Vancouver y dos escuelas judías sufrieron disparos en Toronto y Montreal.
Housefather afirmó que en su nuevo rol buscará un enfoque gubernamental integral para abordar el creciente antisemitismo: “decimos ‘esto es federal, esto es municipal’, la gente es redirigida por todas partes y se sienten frustrados. Necesitamos coordinación entre los diferentes niveles de gobierno”.
Además, agregó que si bien no pueden “hacer desaparecer el antisemitismo, todos los niveles de gobierno, las universidades y la policía pueden tomar medidas concretas para que los judíos canadienses se sientan más seguros en este país”.
Antes de formar parte del parlamento, Housefather fue alcalde y desde su comienzo en la política es un defensor destacado de Israel y los asuntos judíos.
El legislador compartió una de las primeras medidas que impulsará en su nueva tarea: “un delito penal que estoy impulsando fuertemente en términos de legislación sería lo que llamamos legislación de burbuja, que haya una zona de protección para entrar o salir de un lugar de culto, una escuela o un centro comunitario. Si estás bloqueando el edificio, me estás impidiendo ejercer mi libertad de expresión”.
Las principales organizaciones judías de Canadá, así como el embajador de Israel en Canadá, celebraron este nuevo nombramiento.