Antes de Tisha B’Av y en medio de la guerra, el rabino David Stav hace un llamamiento al pueblo judío a no permitir que las discusiones se conviertan en odio: “Cuando vemos que una disputa causa odio, pido a todos, incluido yo mismo, por favor, retírense”.
Por Yoni Kempinski
El rabino David Stav, presidente del movimiento rabínico Tzohar, en una entrevista con Arutz Sheva-Israel National News sobre las conexiones entre las tragedias históricas de Tisha B’av y la guerra actual.
“El Talmud afirma que cuando los niños y niñas judíos son asesinados, es más difícil para Dios que el día de la destrucción del Templo. Este año, miles fueron asesinados y realmente creemos que eso está directamente relacionado con la destrucción del Templo.
“Todos sabemos que el mayor pecado que causó la destrucción fue el odio entre los judíos. Lo mismo nos ocurrió a nosotros este año. Hoy, todos somos conscientes del precio que pagamos por la falta de unidad entre nosotros”.
La solución, dice el rabino Stav, no es evitar el desacuerdo, sino el odio. “Los debates son bienvenidos. En nuestro Talmud, los debates entre rabinos eran comunes. Una disputa es una cosa, pero una ruptura es otra. Cuando vemos que una disputa causa odio, pido a todos, incluido yo mismo, que se retraigan”.
El rabino Stav sigue creyendo que hay esperanza para la unidad pública de Israel. “El espíritu de solidaridad, responsabilidad y deseo de ayudarnos mutuamente es asombroso. Creo que la gran mayoría del pueblo israelí le está diciendo a Dios: ‘Mira cómo tus hijos, en lo más profundo de sus corazones, realmente se aman. Por favor, envíanos la Redención’”.
Fuente: Arutz Sheva