Por Yoni Ben Menachem
• Deportar terroristas al extranjero representa un desafío importante para el Mossad israelí, que se esfuerza en prevenir sus actividades terroristas contra el Estado de Israel.
• Algunos de los terroristas llegarán a Estambul, Turquía, donde el ala militar de Hamás opera bajo los auspicios de la inteligencia turca y del presidente Erdogan.
Uno de los mayores desafíos que enfrentará el Mossad israelí en el futuro cercano será combatir las actividades terroristas de aproximadamente 230 peligrosos terroristas que serán deportados al extranjero como parte del acuerdo para la liberación de rehenes y el alto el fuego en la Franja de Gaza.
Los terroristas serán deportados inicialmente a Egipto, Qatar y Turquía, pero se espera que algunos viajen de allí a otros países.
El establishment de seguridad israelí teme que muchos regresen a las actividades terroristas contra Israel, incluyendo ataques contra instituciones judías e israelíes en el extranjero, secuestros de israelíes, operaciones de contrabando para Irán, establecimiento de infraestructuras terroristas en el extranjero y dirección de atentados terroristas en Judea y Samaria, así como dentro del propio Israel.
Según datos de la Agencia de Seguridad de Israel (Shabak), aproximadamente el 50 por ciento de los terroristas liberados en el extranjero como parte del canje para la liberación del soldado Gilad Shalit, en 2011, regresaron a la actividad terrorista.
Alrededor del 80 por ciento de los que no fueron liberados en el extranjero reanudaron sus operaciones en Judea y Samaria.
Altos funcionarios de seguridad afirman que la liberación de terroristas en otros países proporciona un impulso significativo a la infraestructura terrorista de Hamás, fortaleciendo aún más su liderazgo en el exterior.
En Estambul, Turquía, el “cuartel general en Cisjordania” del ala militar de Hamás, compuesta principalmente por terroristas expulsados en el acuerdo por Shalit, opera bajo la plena protección de la inteligencia turca y del presidente Recep Tayyip Erdogan.
Este cuartel general coordina las operaciones con el “Cuartel General de Cisjordania” en la Franja de Gaza y es responsable de planificar y ejecutar ataques en Israel y en Judea y Samaria.
Según fuentes de seguridad, los terroristas de este cuartel general con sede en Estambul jugaron un papel en la masacre del 7 de octubre de 2023 en las comunidades israelíes que rodean Gaza.
Actualmente, el líder de este cuartel general es Zaher al Jabarin, jefe del ala militar de Hamás en Judea y Samaria, quien reemplazó a Saleh al Arouri luego de su eliminación por parte de Israel en Beirut en enero de 2024.
Al Jabarin, un ex preso liberado en el acuerdo por Shalit, ha ascendido constantemente dentro de las filas de Hamas hasta convertirse en subjefe del buró político de la organización.
El manejo de las operaciones de Hamás en Turquía es competencia del Mossad israelí, pero la realización de operaciones de ataque preventivo en suelo turco plantea un desafío importante debido a la fuerza y eficiencia de la inteligencia turca.
En consecuencia, el Mossad puede optar por esperar las oportunidades para atacar a estos terroristas cuando viajen fuera de Turquía o Qatar.
Sin embargo, la liberación a gran escala de terroristas de alto perfil supondrá una carga inmensa para el Mossad, que requerirá una vigilancia exhaustiva para frustrar posibles ataques.
Esto requerirá una cooperación más estrecha con las agencias de inteligencia extranjeras en todo el mundo.
Después de extensos debates dentro del sistema de seguridad de Israel, se ha hecho una recomendación a los dirigentes políticos para que negocien la deportación de estos terroristas al extranjero.
Aunque rastrearlos y eliminarlos sería más fácil dentro de Judea y Samaria y la Franja de Gaza, su traslado al exterior cortaría el contacto directo con la población palestina, impidiéndoles convertirse en símbolos del terrorismo y limitando sus movimientos debido a la amenaza de una acción israelí.
Se espera que el nivel de vida de los terroristas deportados mejore significativamente y muchos residan en hoteles o residencias privadas en Turquía y Qatar y se integren en altos cargos dentro de Hamás.
La Agencia de Seguridad de Israel evalúa que muchos de los terroristas liberados están altamente motivados a reanudar la actividad terrorista, impulsados por un deseo de venganza por la guerra en Gaza.
Se espera que aprovechen su experiencia y habilidades para promover los objetivos de Hamás.
En última instancia, la deportación de estos terroristas al extranjero amplía la amenaza terrorista global contra Israel.
Si bien se pueden complicar sus actividades terroristas debido a la distancia geográfica, no disminuye el riesgo general que representan para la seguridad de Israel.
La entrada El Mossad israelí apunta a impedir atentados en el extranjero por parte de terroristas palestinos liberados se publicó primero en Aurora Israel Noticias en Español.