Incursiones y maniobras que desatan la alerta
Las recientes incursiones de drones rusos en Polonia y Rumanía, sumadas a las maniobras conjuntas Západ‑2025 entre Rusia y Bielorrusia, encendieron las alarmas en la OTAN. En el polígono militar de Borísovski —a menos de quinientos kilómetros de la frontera polaca— se desarrolló la fase activa de los ejercicios, que incluyó simulaciones de uso de armas nucleares tácticas y misiles hipersónicos Oréshnik. Moscú sostiene que se trata de entrenamientos defensivos, mientras que los aliados lo califican como “violaciones peligrosas e inaceptables”.
En paralelo, la Flota del Báltico y unidades aéreas estratégicas rusas realizaron prácticas de tiro y operaciones antisabotaje, una demostración de fuerza que elevó el nivel de alerta a lo largo de todo el flanco oriental.
La respuesta aliada: operación “Centinela Oriental”
El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, anunció el despliegue de la operación “Centinela Oriental”, con refuerzos inmediatos de cazas, fragatas, sistemas antiaéreos y plataformas de vigilancia. Países como Dinamarca, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos y Reino Unido aportaron Eurofighter, F‑16, Rafale, AWACS, Patriots y buques de guerra.
España confirmó su participación con medios aéreos para misiones de vigilancia y control del espacio del flanco oriental. En palabras de Pedro Sánchez, “Putin no nos va a amedrentar”.
El proyecto del “muro de drones”
Más allá de la respuesta inmediata, Bruselas y los países bálticos impulsan la creación de un “muro de drones” para reforzar la defensa en la frontera oriental. Ursula von der Leyen respaldó la iniciativa, que combinaría aeronaves no tripuladas, sensores distribuidos y observación satelital.
La adquisición y despliegue de capacidades antidrones y de alerta temprana se consideran claves para impedir nuevas incursiones y reducir tiempos de respuesta.
Polonia y el Escudo del Este
Polonia se erige como bastión del flanco oriental, con la ambición declarada de conformar el ejército más poderoso de Europa y alcanzar el medio millón de efectivos. Su plan estratégico, “Escudo del Este”, prevé cúpulas antimisiles, defensas antidrones y barreras físicas a lo largo de la frontera.
La Unión Europea respalda este esfuerzo mediante instrumentos financieros específicos —como los fondos SAFE— que priorizan a los Estados que separan a la UE de Rusia.
Europa ante la amenaza rusa
El refuerzo no es solo regional, sino continental. Como recordó Rutte, “los misiles rusos tardan apenas cinco minutos más en llegar a Madrid que a Tallin”.
La OTAN mantiene despliegues permanentes en Letonia, Rumanía y Eslovaquia —con la mayor presencia exterior de España, incluidos helicópteros Tigre y NH‑90—, subrayando que la defensa del flanco oriental equivale a la defensa de toda Europa.
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