La incertidumbre política se instaló en Honduras tras una de las elecciones más reñidas y extensas de su historia reciente. A casi diez días de la votación, el país aún no conoce oficialmente a su nuevo presidente, mientras avanza un demorado proceso de escrutinio que mantiene a la población en tensión pero, según destacan referentes locales, en absoluta calma.
Humberto Salgado, líder de la comunidad judía hondureña, describió en diálogo radial un escenario inédito: “Nunca había habido una votación tan masiva en Honduras”, señaló, al remarcar que participaron más de 3,2 millones de ciudadanos dentro del país y otros 200.000 en Estados Unidos. A pesar del volumen, destacó que la jornada se desarrolló sin sobresaltos: “En los tres centros de votación que recorrí todo transcurrió en paz”.
El mayor foco de preocupación llegó después. Con más del 99% de las actas escrutadas, la diferencia entre los dos candidatos que lideran el conteo es de apenas 42.000 votos, lo que convierte al proceso en uno de los más ajustados de la última década. “Nunca habíamos tenido una elección tan reñida… y todavía a ciencia cierta no tenemos un candidato que haya sido elegido”, explicó Salgado.
Las caídas en el sistema de transmisión del Centro Nacional Electoral alimentaron sospechas y dieron pie a impugnaciones. “Se caía la transmisión que nosotros veíamos… y cuando regresaba habían grandes diferencias de votos”, relató. La candidata oficialista incluso había anticipado que no reconocería resultados preliminares debido a posibles irregularidades detectadas en audios atribuidos —según se dijo— a inteligencia artificial.
Pese al escenario, el clima social se mantiene estable. “Muy tranquilos, gracias a Dios… el día transcurre con normalidad”, aseguró Salgado. Esto contrasta con episodios de violencia registrados en comicios anteriores. Esta vez solo hubo protestas menores y refuerzos preventivos en zonas sensibles.
El entrevistado también destacó la influencia que tuvo un mensaje de Donald Trump, quien días antes de la elección expresó su apoyo a Nasri Asfura. “Si el hombre mejor informado del mundo nos está diciendo que no votemos por esta gente, debe de haber una razón”, recordó sobre la reacción de muchos votantes indecisos.
El CNE prometió que los resultados definitivos estarán esta semana. Aún resta revisar un 13% de actas con inconsistencias —unas 250.000 papeletas— que podrían cerrar un capítulo político que ya es recordado, como dijo Salgado, casi como una “novela”.
Escuche la entrevista completa.
Hezbollah, Rafah y la Knesset: una radiografía del complejo momento israelí – Natalio Steiner
Janucá: Donde la luz aprende a vivir
La pista de Al Qaeda que destapó una red de inmigrantes ilegales de Medio Oriente en Argentina