Horror en Janucá

Dos hombres armados mataron a tiros al menos a 12 personas y dejaron 60 heridos, hoy domingo, en un evento de Janucá que se celebra en la playa de Bondi, Sídney, para conmemorar la primera noche de esta festividad judía, según las autoridades australianas, en uno de los ataques más mortíferos dirigidos contra judíos fuera de Israel en décadas y el peor contra judíos en el extranjero desde el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023. Entre las víctimas fatales se encuentra un sheliaj (emisario) del Rebbe el Rabino Eli Shlanger y un israelí del cual todavía no ha sido dada a conocer su identidad. 

Líderes judíos en Australia y funcionarios israelíes describieron el mortal tiroteo como una consecuencia del aumento del antisemitismo global desde el 7 de octubre de 2023, y muchos acusaron al gobierno australiano de hacer demasiado poco para proteger a la comunidad judía del país.

El Ministro de Asuntos Exteriores Gideon Sa’ar a la Ministro de Asuntos Exteriores de Australia: “El gobierno australiano debe tomar medidas significativas contra el antisemitismo”

Sa’ar habló con su par la Ministra de Asuntos Exteriores de Australia, Penny Wong, por iniciativa de ella. El canciller israelí expresó su tristeza y dolor, en nombre del pueblo de Israel, por el asesino ataque antisemita en Sidney.

El ministro señaló a la ministro australiana que desde el 7 de octubre ha habido un aumento del antisemitismo en Australia, que incluye llamados a la violencia contra Israel y los judíos en el espacio público y digital, incluidas comparaciones de Israel con los nazis y el Holocausto.

Sa’ar también se refirió a la quema de sinagogas y la quema de banderas israelíes en Australia y a las marchas con claras expresiones de odio.

El responsable de la diplomacia dijo que la seguridad de la comunidad judía en Australia sólo se logrará mediante un cambio real en la atmósfera pública. Llamamientos como Globalizar la Intifada, Del río al mar y Muerte a las FDI no son legítimos y no forman parte de la libertad de expresión y terminaron conduciendo a lo que hemos visto hoy. El gobierno australiano debe tomar medidas contra el uso de estos cánticos antisemitas.

La ministra de Asuntos Exteriores de Australia, Penny Wong, informó a Sa’ar que Australia definió el ataque como un “evento terrorista” y dijo que el gobierno australiano está decidido a atrapar a todos los que participaron en el ataque.

Las autoridades australianas declararon el incidente un ataque terrorista, y el primer ministro del país prometió “erradicar” el antisemitismo.

La escena se desarrolló a última hora de la tarde del domingo cuando dos hombres vestidos de negro abrieron fuego en la famosa playa, con imágenes que mostraban escenas dramáticas de personas dispersándose por la arena y hacia calles y parques cercanos.

El rabino Eli Schlanger. (Captura de pantalla Oficina de Chabad/Shlucham)

El ataque ocurrió mientras cientos de personas se reunían en un parque infantil junto a la playa para un evento llamado Janucá junto al Mar, que celebraba el inicio de la festividad de Janucá de ocho días.

“Este ataque fue diseñado para atacar a la comunidad judía de Sídney”, dijo el primer ministro del estado de Nueva Gales del Sur, Chris Minns. La masacre fue declarada un ataque terrorista debido al objetivo del evento y al uso de armas, dijo Lanyon.

La policía dijo que el evento había reunido a más de 1.000 personas. Se anunciaba como si tuviera entretenimiento en vivo, comida para comprar y juegos para niños, todo culminando en la iluminación de una gran menorá.

De los dos terroristas uno fue abatido y el otro se encuentra herido en estado grave. Las autoridades israelíes investigan la posible participación de Irán detrás del ataque.

La policía dijo que su operación estaba “en curso” y que “varios objetos sospechosos localizados en las inmediaciones” estaban siendo examinados por agentes especialistas, incluido un artefacto explosivo improvisado hallado en el coche de uno de los sospechosos. Los servicios de emergencia fueron llamados a Campbell Parade alrededor de las 18:45, respondiendo a informes de disparos.

El primer ministro Anthony Albanese dijo a los periodistas en Canberra que estaba “devastado” por la masacre.

“Este es un ataque dirigido contra los judíos australianos en el primer día de Janucá, que debería ser un día de alegría, una celebración de la fe. Un acto de maldad, antisemitismo y terrorismo que ha golpeado el corazón de nuestra nación”, dijo Albanese. “No hay lugar para este odio, violencia y terrorismo en nuestra nación.”

Jeremy Leibler, presidente de la Federación Sionista de Australia, dijo que el ataque probablemente provocaría un éxodo masivo de judíos australianos, muchos de los cuales ya estaban considerando abandonar el país.

“Puede que este sea el peor ataque contra judíos en cualquier parte del mundo desde el 7 de octubre, y es el segundo peor tiroteo masivo en la historia de Australia”, afirmó. “No sé qué pasará ahora.”

En Israel, el primer ministro Benjamin Netanyahu y otros acusaron al gobierno australiano de no frenar el aumento del antisemitismo, y algunos vincularon el ataque a la decisión de Canberra de reconocer un Estado palestino en septiembre.

Las políticas de Albanese, que incluyen el reconocimiento de un Estado palestino, fomentan “el odio hacia los judíos que ahora acecha vuestras calles. El antisemitismo es un cáncer. Se extiende cuando los líderes guardan silencio. Debes sustituir la debilidad por la acción”, dijo Netanyahu horas después del ataque, parafraseando una carta que dijo haber enviado a Albanese a principios de este año.