Mordejai Vanunu

Mordejai Vanunu, que nació en la ciudad de Marrakech Marruecos el 14 de octubre 1954, emigró con su familia a Israel cuando tenía 9 años. Tras cumplir con el servicio militar obligatorio en las Fuerzas de Defensa de Israel, estudió en la Universidad Ben-Gurión del Néguev.

Entre 1976 y 1985, Vanunu laboró como técnico nuclear en el Centro de Investigación Nuclear del Néguev, instalación israelí ubicada en el desierto del mismo nombre, al sur de Dimona, la cual, según la mayoría de los expertos en defensa, se usa para fabricar armas nucleares. Ahí le inquietó el programa nuclear israelí. En 1985, fue despedido de Dimona y partió de Israel. Llegó a Nepal y consideró convertirse al budismo. En 1986 viajó a Sídney, Australia, donde se convirtió al cristianismo, adoptando el nombre de John Crossman. Entonces, mientras seguía en Sídney, se reunió con Peter Hounam, periodista del diario británico The Sunday Times, a quien reveló su conocimiento del programa nuclear israelí, con fotografías que había tomado en secreto en el emplazamiento de Dimona.

Entonces, una “novia” estadounidense convenció a Vanunu de viajar a Roma, con ella, de vacaciones. Ya en Roma, la agente de inteligencia se mostró más cariñosa con Mordejái cuando salían del aeropuerto y tomaban un taxi falso, que les llevó a un supuesto hotel, donde Vanunu observó que la habitación estaba oscura y carecía de mobiliario. El técnico advirtió que se trataba de una trampa preparada por Israel, intentó escapar pero no pudo. La amante le aplicó una inyección somnífera y lo durmió por completo. El Mossad se lo llevó al puerto de Roma y lo introdujeron oculto en un barco que zarpaba hacia Israel.

Fue secuestrado por el servicio secreto israelí, Mossad, en Italia y llevado a Israel, acusado de espionaje y traición. Fue condenado a 18 años de prisión, de los cuales más de once de los pasó en un régimen de aislamiento.

Los tres jueces del tribunal de distrito de Jerusalén dijeron al dictar sentencia que habían tenido en cuenta el confinamiento solitario de Vanunu en prisión y su cooperación con las autoridades pero rechazaron los argumentos de la defensa de que sus motivos eran ideológicos.

Vanunu, de 34 años, dio al Sunday Times detalles de sus ocho años de empleo en el centro secreto de investigación nuclear Dimona en el desierto de Negey. El documento concluyó que Israel se desarrollo como la sexta potencia nuclear del mundo y poseía hasta 200 ojivas atómicas.

“La conciencia individual es más importante en la era nuclear que la seguridad del estado. No podemos esperar que el estado siempre tenga la razón. Es necesario que los ciudadanos individuales también asuman su responsabilidad dijo su abogado defensor”.

El estado resistió los intentos de la defensa de abrir el caso a la prensa y al público.

Al ser liberado en 2004, Vanunu afirmó no tener más secretos e indicó su deseo de desligarse totalmente de Israel: se negó a hablar en hebreo y manifestó su voluntad de mudarse a Estados Unidos, Escandinavia, Irlanda o Francia (según las distintas versiones) en cuanto el Gobierno israelí se lo permitiese. El obispo palestino anglicano Riah Abu-El-Assal le dio apoyo en su iglesia.

Las restricciones que le fueron impuestas tras su liberación incluían:

Registrar su lugar de residencia en una ciudad israelí de su elección.

Informar a las autoridades si deseaba trasladarse a otra ciudad de Israel.

Durante los siguientes 6 meses no podía salir de Israel. Esta restricción era renovable al vencer el plazo.

Tener contacto, ya sea telefónico o personal, con extranjeros.

Entrar a embajadas, visitar sitios de embarque, ni acercarse a menos de 500 metros de la frontera internacional.

A pesar de estas restricciones, durante este tiempo Vanunu ha estado dando entrevistas a la prensa internacional, incluyendo una entrevista telefónica en vivo a la radio BBC de Escocia.

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