Nació en Hungría, perdió a toda su familia en la Shoa, sobreviviente de Auschwitz – Birkenau y Mauthausen.
En Mauthausen uno de los guardias, solía acosar a los prisioneros diciéndoles agritos: Ustedes sueñan con Jerusalén… ninguno de ustedes lo verán… todos saldrán de aquí por la chimenea…
Esa frase le cambio la vida y llegar a Jerusalén paso a ser su gran desafio y una obsesión.
Binyamisn sobrevió a la guerra. Emigro a Israel. Su barco fue detenido en altamar y deportado a Chipre, donde conoció y se casó con su esposa.
Vivió 50 años en Afula y a los 70 años, pensionado, decidió pedir trabajar en el departamento de limpieza del Muro de los lamentos.
Al principio no lo aceptaron… Después conto su historia y a pesar de su avanzada edad comenzó a trabajar limpiando el piso del muro de los lamentos hasta ayer…
En una entrevista televisiva dijo: Sentí que era la misión de mi vida. Ver el Muro de los lamentos, todos los días, todo el día…
Además de limpiar el piso, fue un gran educador e inspirador para todo aquel que lo conoció, incluyendo los guías turísticos, quienes venían a el con sus grupos, para que les cuente su historia… lo que siempre hizo acompañado de una sonrisa…