Para mañana 10 de diciembre está anunciado por el gobierno argentino, el festejo por el aniversario de la vuelta de la democracia en 1983 bajo la consigna “Salir a reventar la Plaza”.
En diálogo con Radio Jai, el reconocido politólogo Fabián Calle, realizó un profundo análisis político sobre el tema en cuestión:
“El festejo del 10 de diciembre debería ser un tema pluri-partidario, porque le pertenece a todos los partidos políticos….Si uno tuviera que ser ortodoxo, le pertenece más al radicalismo, o a las fuerzas que ganaron las elecciones de 1983.”
Calle sostiene que es clásico del kirchnerismo hacer una utilización política, sectorial, en este caso, es un uso de guerra interna, que tal como lo señalara Carlos Pagni “Cristina y Alberto se tiran con plazas”, la plaza que es la muestra de fuerza del cristinismo contra la plaza de la CGT o la de los movimientos sociales. “Es una lástima que un evento tan importante, histórico, se haya usado todos los años con algún rol secundario”.
Estas cuestiones no les hacen bien a los vínculos con otros países, con Brasil por ejemplo. “Meterse en la política de estados es imprudente, más cuando el estado con el que te metes es mucho más poderoso que vos”, sentenció. Opinó que la Argentina asume políticas de gran potencia y “estamos raspando la olla de la cacerola” para pagar las deudas, en medio de una situación de 45 por ciento de la población bajo la pobreza y un 65 por ciento de chicos pobres.
“Hacemos ese doble estándar de no meternos en Nicaragua, en Venezuela, en Cuba, y al mismo tiempo, meternos en Chile, en Perú y en Brasil”, señaló. Esa es una política dedicada a dejar contentos a la “pequeña burguesía de izquierda de Palermo Soho”, unas cien mil personas, que ni siquiera representan la base del peronismo, a quienes les importa “tres belines” Lula o Bolsonaro. “Hipotecamos la política por unos pocos, esos que llaman en Brasil ´comunistas Nutella’, los ‘comunistas con Iphone”, concluyó.