Gertrude Belle Elion: La científica judía que salvó la vida de más de 500,000 personas

La mujer que salvó millones de vidas

Gertrude Belle Elion (1918-1999) nació en Nueva York de una familia lituano-polaca judía. Destacó en la escuela y cuando su abuelo partió a causa del cáncer se propuso encontrar la cura. Se presentó como voluntaria en un laboratorio químico y eventualmente la contrataron por 20 dólares a la semana. Usó ese dinero para pagar su escuela y en 1941 obtuvo una maestría en química.

Desafortunadamente, Elion fue rechazada de todos los doctorados y becas debido a su género. En cambio, tuvo que trabajar en un supermercado probando la calidad de la comida. Después de ese trabajo consiguió un puesto como asistente en un laboratorio de Nueva York. Trabajando bajo la supervisión de George Hitchings, desarrolló dos medicamentos anti-cáncer nuevos en 1950. Continuó trabajando en el laboratorio y eventualmente se convirtió en la directora del departamento de Terapia Experimental.

A pesar de que nunca obtuvo formalmente un doctorado fue profesora de farmacología en la universidad Duke entre 1971 y 1999. Entre los medicamentos que Elion desarrolló se encuentran Purinethol (el primer tratamiento para la leucemia), Daraprim (para tratar la malaria) y Acyclovir (el primer y más usado antiviral; se usa para curar herpes y varicela). También descubrió el Azathioprine un medicamento que previene el rechazo a un trasplante de órganos, que desde 1963 hasta la fecha ha ayudado a más de 500,000 personas a tener un trasplante de riñón exitoso. Entre otros de los medicamentos que desarrolló se encuentran medicinas para la meningitis, gota e infecciones urinarias y respiratorias.

Aunque se había retirado oficialmente del mercado farmacéutico en 1983, fue inspirada a seguir trabajando cuando surgió el brote de VIH Siguió trabajando tiempo completo hasta que produjo exitosamente un AZT, el primer medicamento usado para tratar el SIDA.

Por todo su trabajo que salvó la vida de cientos de miles de personas, Elion recibió el premio Nobel en Medicina en 1988. Recibió la Medalla Nacional de Ciencia en 1991, y en ese mismo año se convirtió en la primer mujer en ser incluida dentro del Salón de la Fama Nacional de Inventores. Finalmente recibió un doctorado honorario de la Universidad de Nueva York en 1989 y otro de Harvard cuando tenía 80 años de edad. Es responsable de más de 45 patentes y es reconocida como una de las farmacólogas y bioquímicas más grandes de todos los tiempos.

Fuente: Jew of the Week

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