Los judíos hemos desarrollado una necesaria hipersensibilidad que nos alerta ante el peligro.
La aparición en la región de un sospechoso avión con una tripulación vinculada a países que promueven el terrorismo encienden las alarmas.
Desde ya el terrorismo no es un problema judío o israelí, golpea indiscriminadamente aunque, de vez en cuando, el target sea un objetivo israelí o judío. El daño y destrucción siempre será en vidas y en los valores de libertad y convivencia pacífica que pretendemos en nuestras democracias.
Combatir el terrorismo, sus fuentes de financiación, células dormidas o activas requiere de una acción decidida y responsable por parte de los Estados.… Leer más
